El ministro de Educación, Enrique Riera, se prepara para buscar hoy un acuerdo con los representantes de los gremios de educadores, pese a que aclaró en reiteradas ocasiones que no existe presupuesto para pagar un aumento salarial del 15% para los docentes de grado y 10% para los catedráticos, como exigen los sindicalistas con la amenaza de postergar el inicio de clases, previsto para el 23 del corriente.
El ministro dijo que va a plantear a los gremios su voluntad de “pelear en Hacienda, con el Gobierno, en el buen sentido de la palabra” para que se pueda cumplir con los G. 36.000 millones para el escalafón que le reclaman los sindicalistas desde que asumió el ministerio.
“El Gobierno, si tiene voluntad y hay forma de recortar gastos superfluos, viáticos, viajes, consultorías que sabemos están insertos dentro del presupuesto, a lo mejor podemos juntar una parte, pero no podemos volver a la versión final de Senadores de aumentar el 15% y 10% el salario. No se va a poder cumplir”, dijo.
Por su parte, Gabriel Espínola, de la Organización de Trabajadores y Educadores del Paraguay Auténtica (OTEP), indicó que el 10 de febrero van a tener un congreso unitario con las demás organizaciones sindicales para “iniciar jornadas de protestas con movilizaciones, con lo cual podría suspenderse la continuidad del calendario escolar” ante el incumplimiento por parte del Gobierno del acuerdo firmado en agosto del 2016, que estableció el salario básico profesional.
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“En ese acuerdo firmado, se establecía que a partir del 2017 se iba a dar un aumento del 23%, que no se cumplió, a pesar de llegar a un porcentaje diferenciado en el Parlamento, que finalmente el presidente Cartes vetó”, afirmó.
Espínola agregó que no están hablando de huelga, solo de movilizaciones y postergación del calendario escolar, ante la intención del MEC de aplicar las obligaciones de la Ley de la Función Pública a los docentes para que garanticen el servicio educativo, que estos esgrimen no les corresponde legalmente.
“En esta reunión esperamos que el ministro supere sus verborrágicas presentaciones para tener planteamientos concretos y correctos para la implementación del calendario escolar sin contratiempos”, refirió.
Algunos ya empezaron
Varias instituciones privadas del país ayer celebraron su primer día de clases, aisladas del conflicto que hoy involucra a los docentes del sector oficial que reclaman un aumento salarial mayor de lo que el Gobierno anunció que podrá ofrecer, lo que pone en peligro el inicio oficial de clases el próximo 23 de febrero.
En ese contexto también se registra una migración de alumnos del sector privado a instituciones educativas públicas debido a que los padres no pueden afrontar los abultados costos de matriculación, mensualidad y manutención de la educación de sus hijos en instituciones privadas, que cada año incrementan porcentajes.
En varios colegios, como el Nihon Gakko (foto), ayer se dio la bienvenida a los alumnos.