Norma Giménez, técnica de la Dirección Municipal de Gestión Ambiental, explicó que se pusieron el objetivo de limpiar el arroyo desde su nacimiento en Eusebio Ayala y Choferes del Chaco, hasta su desembocadura en Tablada Nueva. La idea es, por un lado, que la gente se sume y deje de tirar basura en la cuenca y, por otro, conseguir multar y concienciar a todas las empresas que tiran sus residuos.

Al mismo tiempo se trabaja en terminar con todos los focos de dengue. Los funcionarios hacen un recorrido casa por casa; además por el cauce y se puede ver el estado del mismo. “Se encontró, por ejemplo, que la propia Essap tiene una desembocadura de desagüe cloacal. En ese caso se labró acta”, comentó Giménez.

Anunció que para la tercera gran minga del 16 de febrero se estiman unos 1.000 voluntarios que ya se inscribieron. Por ahora la convocatoria está cerrada.