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Julio Pallarolas y Pragnacio Acosta, miembros de la coordinadora, visitaron ayer la redacción de ABC Color y reiteraron su postura de defender el predio del RC4 debido a que el proyecto de construcción de 2.500 viviendas para damnificados, según sostienen, terminará por derribar un bosque que sirve de amortiguamiento al Jardín Botánico y Zoológico de Asunción.
Pallarolas manifestó que, en una segunda etapa, la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat) pretende construir casas en un área boscosa y que en la primera etapa se busca edificar en un sector que puede ser reforestado.
Recordó que aún está pendiente en la Cámara de Senadores estudiar el proyecto de ley que busca declarar como “área silvestre protegida” a las 57 hectáreas que componen el predio militar donde se planean edificar las viviendas, ya que el documento fue rechazado en la Cámara de Diputados.
Ambos argumentaron que el estudio de impacto ambiental de la Secretaría del Ambiente (Seam) aprobó el proyecto y que en la delimitación del área donde se construirán las viviendas se contempla derribar parte del bosque defendido por los zeballences.
Pallarolas dijo que el proyecto va en contra de los convenios internacionales que Paraguay suscribió para reducir el impacto del calentamiento global y la emisión de gases de efecto invernadero que poluyen el ambiente y reducen la calidad del aire que se respira en las grandes urbes del mundo.
Reiteraron que no están en contra del proyecto, pero sí solicitan que este se traslade a otro sector de la ciudad. El más apto sería el de Chaco’i, ubicado al cruzar la Bahía de Asunción donde es posible, incluso, construir un complejo para albergar a la totalidad de familias que tuvieron que buscar refugio por la crecida del río Paraguay.
El proyecto
El proyecto de la Senavitat, ejecutado a través de la Itaipú Binacional, contempla la construcción de 1.000 viviendas sociales (en una primera etapa) en un sector que actualmente está libre de árboles, pero que según los zeballences puede ser reforestado. En la segunda etapa (que aún no fue proyectada), la iniciativa pretende la edificación de otras 1.500 viviendas en una franja del bosque que también quieren preservar.
Según manifestaron los técnicos de la Itaipú Binacional durante la audiencia realizada ante ingenieros interesados en el proyecto el martes, el presidente de la República, Horacio Cartes, indicó que su deseo es que las 1.000 familias damnificadas pasen la Navidad de 2016 en las nuevas casas.
Los detalles de la licitación se darán a conocer en el 10 de marzo.