Lambaré quiere recuperar sus límites despojados

En 1968, Alfredo Stroessner impuso de manera arbitraria y sin estudio alguno nuevos límites a la ciudad de Lambaré, lo que hasta hoy ocasiona diversos problemas. La intendencia de este municipio pedirá nuevos límites.

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Armando Gómez, intendente de Lambaré, señaló que están trabajando para realizar al Congreso un pedido formal de, primero, una reparación histórica, y segundo, nuevos límites demarcados correctamente y no como están actualmente.

“Perdimos de manera estúpida nuestros límites porque Humberto Domínguez, amigo del dictador, esperó más de media hora para ser atendido por el intendente de ese entonces, Francisco Olmedo, y al retirarse molesto se comunica con Stroessner para expresar su queja porque su intención era construir el Hotel Itá Enramada. Al día siguiente, Stroessner cercena arbitrariamente la ciudad de un plumazo, y pasó a Asunción el lugar donde luego Domínguez instaló su hotel”, comentó.

La directora de Desarrollo Urbano, Gladys Gulino, explica que el decreto de Stroessner decía que la ciudad de Lambaré iba a llegar hasta 200 metros para adentro de la avenida Perón, General Santos y Fernando de la Mora, pero cuando realizaron la demarcación con expertos, en 1988, se dieron cuenta de que no existía ninguna calle bien definida a 200 metros de estas avenidas, por lo que se delimitó con varios quiebres.

Tierra de nadie

Varios ciudadanos están prácticamente en tierra de nadie porque los límites son totalmente irregulares, por lo que padecen la falta de recolección de basura, problemas de inscripción de títulos de propiedad, ocurren invasión de calles o situaciones absurdas de tener una parte de la misma propiedad en dos municipios, como ocurre con el Colegio Gutenberg. La zona de Itá Enramada, por ejemplo, es considerada tierra de nadie.

Anteriormente, Lambaré tenía como límite el río Paraguay, el arroyo Ferreira hasta la avenida Japón, incluso hasta el barrio L. Petit. “Normalmente, los límites en las ciudades se tienen que asignar de manera muy específica con un arroyo, río o avenida. Nosotros ahora ya no pedimos llegar hasta el arroyo Ferreira; solo queremos la zona del Cerro Lambaré, y que nuestros límites sean las avenidas Perón, General Santos, y Fernando de la Mora, para que esté bien definido”, añadió la arquitecta Gulino.

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