La madre Yvonne dirige a nivel mundial los emprendimientos educativos de la Hijas de María Auxiliadora. La religiosa señaló que entre los desafíos de la congregación está poder seguir brindando a los jóvenes de hoy una educación de calidad. La madre recomendó reconocer el mundo juvenil de hoy, haciéndoles protagonistas de la construcción de la sociedad, de la iglesia y de la familia, y ofrecer una educación que les prepare de verdad para la vida.
“Esto exige continua formación y requiere escuchar al mundo juvenil. Solo uniendo fuerzas con las familias, oratorios y escuelas podemos hacer una educación que pueda tener incidencia en la vida de los jóvenes”, dijo.
Sobre la educación que requieren los jóvenes dijo que debe ser integral. “La formación que deben recibir los jóvenes es aquella que les permita construir su personalidad para que sean capaces de pensar y elaborar cultura y de transformar la sociedad y el mundo de hoy según el proyecto de Dios. Es una educación integral que debe atender todos los aspectos de la formación humana y cristiana”, apuntó.
