Los pacientes del Incan dependen de donaciones

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Las pacientes del Instituto Nacional del Cáncer (Incan) suspendieron ayer la manifestación de protesta frente al Ministerio de Salud luego de que se les prometa una nueva donación del fármaco Trastuzumab, para las quimioterapias de personas con cáncer de mama. Este producto está con stock cero en la cartera.

La situación de las afectadas es de angustia, pues están viviendo de la caridad de algunas empresas. “No sabemos si mañana tendremos. Los médicos nos dicen que vivamos sin quebrantos para que el tratamiento contra el cáncer sea efectivo. Sin embargo, es imposible estar tranquilas si no sabemos hasta cuando tendremos nuestra medicina”, señaló una de las pacientes que pidió la reserva de su nombre.

Comentó que la falta del citado fármaco en los depósitos es de hace varias semanas. Incluso hay denuncias de que una de las oncólogas del Incan no quiso usar el Trastuzumab donado por una de las empresas farmacéuticas, ya que la profesional prefería de otro laboratorio. “Queremos seguir el tratamiento y que la guerra entre empresas, donde se meten los médicos, no afecte nuestra recuperación”, dijo.

Actualmente, Salud ya adjudicó la provisión de Trastuzumab a la firma Quimfa (Óscar Harrison), pero la licitación fue protestada por Casa Boller, de José Campos Cervera. Esto hizo que la cartera, por prudencia administrativa, no emita las órdenes de compra hasta que Contrataciones Públicas dictamine sobre el proceso. “No es nuestra culpa que falte el fármaco. Presentamos la protesta porque creemos que hubo errores. Esto no hubiera pasado si el llamado se hacía con tiempo, no esperando stock cero”, dijo Campos Cervera.