El Consejo Superior Universitario de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) había decidido tratar dentro de dos meses la propuesta de reforma del estatuto.
Esta postergación no fue del agrado de los estudiantes ya que de tratarse recién dentro de 60 días, coincidiría con las elecciones de todos los consejos directivos de las 12 facultades, previstas para octubre. Esto permitiría de vuelta otra “cocinada” para los comicios, según explicó el vocero de #UNAnoteCalles, Fernando Krug.
Los cambios de los artículos del estatuto contemplan básicamente el fin a los nombramientos y contrataciones sin ningún concurso para los amigos de las autoridades de turno dentro de la UNA, como también la eliminación de cargos de confianza y la designación de rubro docente para los funcionarios administrativos.
También se prevé en el estatuto renovado la elección de decano por no más de dos periodos, ya sean continuos o intermitentes.
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Krug afirmó que la situación ya está clara y las líneas de acción fueron trazadas, tras las asambleas que iban realizando en estos días las distintas facultades.
Se otorgará a partir de mañana lunes hasta el viernes 12 de agosto un plazo para que el Consejo Superior Universitario (CSU) se reúna en forma extraordinaria y revierta su postura, que es la de estudiar el estatuto, un documento de cincuenta páginas, en dos meses. Los alumnos piden que sea en un tiempo máximo de una semana.
Paralelamente, se ejercerá también presión para que el rector Abel Bernal, fuerce una sesión del Consejo de manera urgente y que se revierta la postura vigente.
Si cumplido el plazo, no dan el brazo a torcer, se prevé un paro general de la UNA, replicando el de setiembre del año pasado, cuando estalló la revuelta de los alumnos y barrió con gran parte de los corruptos.
“Ahora se buscará nuevamente sanear la institución de todos aquellos que siguen queriendo que nada cambie. En esa barrida también está incluido el rector”, aclaró Krug, antes de finalizar la conversación con ABC Color.
En Ingeniería y Filosofía buscan forzar renuncias
Los centros de estudiantes de las facultades de Ingeniería y Filosofía, en asamblea extraordinaria, decidieron no aceptar las elecciones que se llevaron a cabo en sus respectivas casas de estudios y enfatizaron que solo van a volver a las aulas cuando renuncien las autoridades de la institución, Éver Cabrera y Ricardo Pavetti, respectivamente.
Mientras en Ingeniería ya anunciaron oficialmente que la paralización de las actividades será por tiempo indefinido, en Filosofía la situación podría replicarse, pero tendrá un último análisis en una plenaria que se llevará a cabo mañana a la tarde.
En Filosofía, el centro de estudiantes también asegura que irá por la cabeza de los representantes estudiantiles ante el Consejo.
“Claramente la postura que asumen ellos no representa al colegiado, están de lado del decano y de toda su gente y no de parte de los que somos sus compañeros”, dijo el presidente del centro de Filosofía, Diego Díaz.