El legislador, rector de la Universidad Nacional de Pilar, describió la crisis que golpea a la capital del Ñeembucú debido a las intensas y constantes lluvias y la crecida del río, que ayer estaba en 8 metros de altura (alerta amarilla), cuando la cota normal es de 3,5 metros.
“Por lo menos que nos envíen un helicóptero; las calles de Pilar son ríos”, expresó, también en tono de desesperación.
Mencionó que en medio de esta situación ayer perdió a un amigo. Se trata del director académico de la Facultad de Ciencias Contables de la Universidad Nacional de Pilar (UNP), Adolfo Velázquez, quien sufrió un infarto cuando circulaba en su camioneta durante la tormenta y su vehículo volcó a una cuneta. Fue llevado al hospital de la ciudad donde se constató su fallecimiento.
“Era miembro del consejo superior universitario y un gran amigo, presente desde la fundación de la universidad”, refirió.
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Ríos comentó que Velázquez se dirigía a la facultad en cuestión, ya que el lugar fue habilitado para recibir a las familias damnificadas.
Víctor Ríos reafirmó que las autoridades en Pilar ya se encuentran desbordadas. “Piden socorro; en algunos barrios ya no se puede llegar ni en camionetas normales. Es desesperante la situación general en Pilar”, describió.