El ministro Lezcano ofreció una conferencia de prensa ayer en la sede de la cartera estatal, acompañado de su viceministro Ariel Martínez y el comisario principal César Silguero, uno de los designados para investigar el brutal atentado ocurrido el miércoles de mañana en el barrio Madame Lynch de Asunción.
En el ataque de sicarios, murieron el pedrojuanino Willian Giménez Bernal (28) y su hijo Gabriel Giménez González (5).
Entre otras cosas, Lorenzo Lezcano dijo que “con la Agregaduría de la Policía Federal de Brasil, intercambiamos información constante sobre estos grupos del crimen organizado trasnacional. Gracias a este trabajo, dimos golpes fuertes a estas organizaciones delictivas, los cuales, sin embargo, son insuficientes y, por ello, acentuamos día a día esa lucha”.
Después, manifestó: “rechazamos las expresiones de sectores políticos que pretenden fortalecer sus campañas electorales con declaraciones oportunistas, que buscan sacar ventaja electoral con la muerte de un niño. Hablan con ignorancia o mala fe”.
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Pese a que inicialmente la convocatoria a los medios era para informar sobre avances en la investigación del atentado, lo que justamente estaba esperando todo el país, el ministro Lezcano y su equipo aprovecharon a los periodistas para contestar a la oposición que criticó severamente la inseguridad que hay en Paraguay.
Incluso, cuando Lezcano o el comisario Silguero fueron consultados por algunos datos puntuales sobre el ataque, se excusaron al señalar que primero lo hablarían con la Fiscalía. Solamente si es necesario lo van a socializar, respondieron.
Tras el último ataque, el propio Ministerio del Interior había recordado, tendenciosamente, que el ahora fallecido Willian Giménez visitaba frecuentemente a Jarvis Chimenes Pavão, tal como otro miembro del primer anillo del capo que igualmente fue asesinado luego de salir de una visita en la Agrupación Especializada.