Miles de creyentes católicos de la Arquidiócesis de la Santísima Asunción dieron ayer apertura al III Congreso Eucarístico en la Costanera. El evento que irá hasta el domingo meditará la importancia de la eucaristía y su aplicación en la vida real para transformar las estructuras de pecados.
La actividad previa del Congreso comenzó a las 18:00 con la actuación de grupos musicales y ballet que hicieron que los minutos transcurrieran en forma grata hasta llegar al inicio del acto principal que estuvo a cargo del arzobispo de Asunción, Mons. Edmundo Valenzuela.
El pastor explicó a los presentes los motivos que llevaron a organizar el Congreso, destacando que el objetivo principal es valorar la eucaristía y promover una Iglesia en salida hacia el necesitado.
En otro momento de su alocución, la máxima autoridad de la Iglesia en Paraguay reclamó nuevamente el saneamiento moral de la nación. “Constatamos la corrupción generalizada, tráfico de drogas, la narcopolítica, la falta de justicia, la pobreza extrema de 17% de la población, la práctica del aborto, el cáncer del divorcio, el lobby de la ideología de género”, como los males de nuestra sociedad.
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Valenzuela también abogó por un plan estructural a nivel de Municipalidad de Asunción, para dar solución a tantas necesidades, de casas abandonadas, calles, plazas y lugares públicos que exigen cuidado y protección y programas de embellecimiento de la capital.
Seguidamente, insistió en la necesidad de tener un proyecto país que recupere los intereses de la patria por encima de los partidarios, sostenga la soberanía energética en los tratados de Itaipú y Yacyretá, la defensa de la familia y del matrimonio entre varón y mujer y promueva un educación de calidad y acceso a la salud para la población carenciada y ofrezca soluciones a los inundados.
Ya durante la misa, que estuvo presidida por el cardenal Daniel Sturla, el purpurado, al dirigirse a los jóvenes, dijo que “la eucaristía nos dice: entrégate, quédate, ayuda....”.
Invitó a los jóvenes a no huir del deber con la sociedad. “Paraguay necesita de tu entrega generosa. No te vayas, quédate en este país que amas, sí, prepárate, haz masters y doctorados, pero vuelve a tu tierra, sírvela, ámala... Y si igualmente te tienes que ir, ayuda siempre a los tuyos...”, dijo el cardenal a los jóvenes.
Los pobres
En otro pasaje de su alocución se refirió a los pobres e indicó que este miércoles 13 de junio, el Papa ha dado una sorpresa y agregó que en la Iglesia hay muchas jornadas en el año como la Jornada Mundial de la Paz, de las Comunicaciones Sociales, de las Vocaciones, etc.., pero el Papa acaba de instituir la Jornada Mundial de los Pobres, que se celebrará el 19 de noviembre. Agregó que el Pontífice animó a los cristianos, creyentes de otras religiones y en general a todo el mundo, a invitar a los pobres “a nuestra mesa como invitados de honor”.
Sturla resaltó que los pobres, “con su confianza y disposición a dejarse ayudar, nos muestran de modo sobrio, y con frecuencia alegre, lo importante que es vivir con lo esencial y abandonarse a la providencia del Padre”. Seguidamente, indicó que “abrazarse a Cristo Jesús es también abrazar al hermano que sufre, al hermano marcado por la pobreza y el dolor. Añadió que el Congreso Eucarístico, donde se experimenta el abrazo a Jesús presente en su carne en la Eucaristía, debe llevar también al abrazo a los hermanos que sufren.
La misa fue solemne, animada brillantemente por el coro (Schola Cantorum) y una vez finalizada, como broche de oro, los participantes fueron despedidos con la bendición del Santísimo Sacramento. El Congreso Eucarístico culmina el domingo con una misa a las 11:00 en la Catedral Metropolitana. (Ver programa en la infografía).
