28 de agosto de 2016 - 22:08
Le devuelven al hijo en un cajón
Este artículo tiene 9 años de antigüedad LIMPIO (Rocío Portillo, corresponsal). En medio de una inmensa tristeza fue recibido y velado ayer en su humilde vivienda (foto) el vicesargento primero Genaro Dejesús Arias Palacios, por sus familiares, camaradas y amigos. Arias es otro de los militares asesinados por el autodenominado grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) en Arroyito (Concepción). Su padre, César Agustín Arias, comentó que en setiembre pasado el militar fue trasladado a Concepción en forma “arbitraria”. Anteriormente prestaba servicio en la 5ª División de Infantería, en Alto Paraguay, fronteriza a Bolivia, y fue trasladado a Concepción. El hombre lamentó que le devuelvan a su hijo en un cajón.
“Hace poco recibió su ascenso, y ni siquiera su certificado pudo tocar, sus propios camaradas me entregaron; es muy triste todo esto, la vida de mi último hijo que acabe así”, indicó Arias. El entierro será hoy a las 10:00 en el cementerio local, aseguró. El padre dijo además que no puede pedir justicia “porque eso no existe en Paraguay”.
Contó que sin su hijo quedan prácticamente huérfanos porque él era el sostén económico del hogar, además de dejar a una niña de 2 años. “Con él accedimos al seguro del Hospital Militar, ya que en otros locales de salud la atención es nula”, añadió Arias.