Los casos más comunes denunciados son por cierres arbitrarios de caminos que siempre utilizaron los pequeños ganaderos. Los grandes pecuaristas colocan portones con candado y para reforzar contratan guardias privados armados para que nadie ose cruzar la “línea de límite”.
El último caso ocurrió en la compañía San Carlos de Fuerte Olimpo. La denuncia fue presentada en el Ministerio Público por un poblador identificado como Alejandro González, quien dijo que guardias privados contratados por el ganadero Sergio Cassio procedieron a cerrar el portón del único camino que poseen para llegar a su propiedad donde trabaja desde hace más de 21 años.
Este caso también afecta a varias familias de la zona conocida como Karandayty, que viven en el lugar desde hace más de 50 años. Ahora se encuentran con la sorpresa de que no pueden transitar por los caminos que siempre utilizaron por lo que deben realizar varios kilómetros demás para llegar salir o ingresar. La situación se complicará en casos de emergencia, cuando tengan que trasladar a algún enfermo al Hospital Regional de Fuerte Olimpo.
La triste situación por la que atraviesan los compatriotas que hacen patria por estos lejanos lugares demuestra la ausencia del Estado y la falta de responsabilidad de las autoridades judiciales para velar por la seguridad de las personas.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Desde el año 2000 se registra en la zona la presencia de ganaderos extranjeros, en su mayoría brasileños y últimamente uruguayos. Proceden a la compra de grandes hectáreas de tierras y pronto cierran caminos que cruzan por las propiedades afectando a poblaciones enteras como San Carlos y Toro Pampa.
Muchos de estos extranjeros son muy laboriosos, pero algunos utilizan la prepotencia y el poder económico para sobornar a funcionarios judiciales y policiales, y recurren al cierre de vías para chantajear a los compatriotas con el propósito de quedarse con sus tierras pagándoles precios muy bajos. Con esas cadenas y los candados que colocan a los portones encadenan la dignidad de los humildes pobladores que se sienten huérfanos de sus autoridades.
calmiron@abc.com.py