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1. Hace ya algunos años, cuando manejaba la investigación del agua subterránea en el Chaco, desde el Ministerio de Defensa Nacional, recibí una invitación del Gobierno brasileño para visitar, entre otras cosas, la zona del Pantanal y un pozo que explotaba un acuífero llamado Guaraní.
2. El Gobierno brasileño envió al Paraguay a un geólogo, de contextura baja, de apellido Castelo Branco, con quien recorrimos primero el Chaco y después fuimos al Brasil a ver lo que querían mostrarme.
3. Recorrimos el Pantanal de punta a punta en una avioneta, para después pasar a una ciudad que creo se llamaba São José dos Campos. El agua que abastecía la ciudad, según ellos, provenía del Acuífero Guaraní, que estaba a 1.200 m. de profundidad, razón por la que dicha agua era caliente. El agua, de buenísima calidad desde el punto de vista de su contenido en sales, era caliente por la profundidad de donde provenía. El caudal de este pozo era 1.200 m³ de agua por hora (un millón doscientos mil litros de agua por hora).
4. Allí me informaron que otro pozo de la misma profundidad, que explotaba el mismo acuífero, estaba en la ciudad de Montevideo, Uruguay, propiedad de la empresa láctea Conaprole, y que el agua tenía las mismas características que el de São José dos Campos.
5. También me comentaron que el mencionado acuífero se extendía desde el Uruguay al Brasil, Paraguay y Argentina.
6. Me parece una barbaridad que nuestro gobierno haya firmado un acuerdo, como el que menciona el diario, renunciando a nuestra soberanía sobre el acuífero que está en nuestro territorio.
7. En primer lugar una perforación buscando agua, de la profundidad que sea, no daña el medioambiente, ni puede extender daño alguno al acuífero y mucho menos a los territorios de las naciones vecinas.
8. El Paraguay es un país libre y soberano y puede disponer, cuando lo considere necesario, del agua del acuífero de su territorio.
9. De acuerdo a los resultados de un estudio del acuífero Guaraní realizado últimamente por el Banco Mundial, la zona de recarga del mismo está en el Paraguay, hasta el punto que el Senacsa (Servicio Nacional de Saneamiento Ambiental) tiene construidos más de 100 pozos explotando dicho acuífero.
10. La única perforación profunda realizada en la Región Oriental de nuestro país fue la que se hizo en Ciudad del Este, que alcanzó 600 m y el agua fue salobre. Esto pone en duda si la calidad del agua del acuífero Guaraní es en los cuatro países la misma.
11. Nosotros necesitamos unas 10 perforaciones profundas para saber realmente qué es lo que tenemos del Acuífero Guaraní en nuestro territorio
12. Una sola perforación de 1.200 m de profundidad debe tener, fácilmente, un costo oscilando entre dos millones y dos millones y medio de dólares, y en nuestro Presupuesto General de Gastos de la Nación, teniendo en cuenta nuestras necesidades en salud, educación, reforma agraria y otras cositas, por el momento no creo que podamos realizar dicho estudio.
Pero, naturalmente, no por eso vamos a firmar acuerdos internacionales renunciando a nuestra soberanía sobre un recurso natural como es el agua que está en nuestro territorio.
13. Finalmente, cuando el expresidente Fernando Lugo firmó dicho acuerdo, por lo visto no sabía lo que hacía. El Congreso de nuestro país jamás debe aceptar tal acuerdo.