El oro de Paso Yobái

Este artículo tiene 8 años de antigüedad

Cuando no se respetan las instituciones sólo es posible la anarquía. Los acontecimientos que ponen en ridículo a la querida Villarrica y a todo el departamento del Guairá –en rigor, a todo el Paraguay– obedecen al atropello a las leyes y a la ética. Desde hace meses se viven escenas que en teatro se llamarían esperpento, absurdo, farsa, bufonadas, comedia de enredos, etc. Cualquiera de estos géneros retrataría con admirable precisión el momento político que padece el país.

Todo es mentira, medias verdades, artimañas, traiciones, transfugadas para llegar a objetivos igualmente confusos, opacos, oscuros. En el fondo solo brillan la codicia y la ambición desmedida de poder.

El vía crucis guaireño se inició en marzo pasado. El gobernador Rodolfo Friedmann se pronunció en contra del proyecto de atropellar la Constitución Nacional para que Cartes, con ayuda de Fernando Lugo y Blas Llano, intente la reelección. Vino la ruptura Cartes-Friedmann, y detrás de ella las demás rupturas.

Un día apareció la renuncia del gobernador en la mesa de entrada de la Gobernación sin que nadie supiera quién la había entregado. Friedmann se encontraba en el exterior pero el documento fue aceptado de inmediato. El gobernador niega haber renunciado. Los concejales departamentales, en mayoría, dieron por auténtica la firma.

La intervención judicial, que nombraba y desnombraba gobernador, a igual que el Tribunal de Justicia Electoral, fue una verdadera fiesta que hizo reír al país. Pero detrás de esas carcajadas estaban la tristeza y el asombro por unos hechos inauditos que ponían a Villarrica en el centro de la burla inmerecida.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Los adversarios de Friedmann no se cansan de señalarlo como un consumado corrupto. En el inicio de los desórdenes estuvimos Roque González Vera y yo en Villarrica para pulsar el ambiente. Entre las muchas personas con quienes hemos conversado –de ambos bandos– estuvo el abogado David Bogado Lisboa. Nos recibió en su oficina con una montaña de documentos acerca de un proyecto de agua potable para el que la Gobernación recibió 1.500 millones de guaraníes para la construcción de cinco pozos. “Friedmann, nos dijo, se quedó con 700 millones. Aquí la ciudadanía es la única víctima real. La forma en que roba este tipo (Friedmann) es fenomenal. Está comiendo todo lo que puede”.

También se lo menciona en casos de corrupción en muchas obras públicas. Entonces uno se pregunta: ¿Por qué tales documentos no se presentan a la Fiscalía respectiva? De probarse los delitos sería menos traumático desprenderse del gobernador antes que tejer y destejer intrigas, dictar y luego anular resoluciones judiciales para luego volver a hacerlas efectivas.

En Villarrica se tiene la generalizada creencia de que no se está sufriendo un problema político sino económico a partir del oro de Paso Yobái. También aquí estuvimos con Roque en marzo último. En esta localidad se vive del oro.

El expresidente de la Asociación de Pequeños Mineros y Afines de Paso Yobái, Mario Espínola, nos dio estas cifras: operan 80 molinos en forma clandestina, trabajan 4.000 personas en la mina; el oro se cotiza a 130.000 guaraníes el gramo comprando en la mina; la producción mueve 1.560 millones de guaraníes semanales en Paso Yobái.

“Queremos ser legales –nos dijo Espínola– porque esta situación de ilegalidad nos pone a merced de la clase política guaireña”. Aquí saltó este dato: el concejal departamental, dos veces gobernador desde marzo pasado, Óscar Chaves Resquín, no solo se dedica a la búsqueda de oro: tiene dentro de su propiedad un molino que le permite cerrar el círculo de la explotación. Este señor Chaves fue partidario de Friedmann.

La informalidad de los trabajadores hace que las autoridades locales y regionales extorsionen a los mineros y estos tengan que entregar, según nos dijeron, grandes sumas de dinero a cambio de no ser molestados. En este asunto ha sido mencionado el gobernador Adolfo Friedmann. Al parecer, hay otro grupo que pretende quedarse con toda la producción, que es inmensa.

En apariencia al menos, detrás de las maquinaciones por ganar la Gobernación está la codicia. Después la política. Como hay oro suficiente, los guaireños deben prepararse para un largo conflicto.

alcibiades@abc.com.py