Con algunas esporádicas visitas al Paraguay quedó encantado de su exuberancia y se quedó como un paraguayo más desde el año 1887. Se afincó en el hoy Puerto Bertoni, muy cerca de Pto. Pdte. Franco, Alto Paraná, y comenzó a experimentar con todos los rubros agrícolas, con las especies forestales, con animales menores y fue un estudioso del comportamiento climático durante 34 años.
También las semillas de los granos fueron esparcidas en su finca y comenzó a indagar el cultivo del trigo. Pero no prosperó nada debido al origen frío de esas simientes. Este es un país de clima subtropical, el invierno es atípico, hay copiosas lluvias, algunas heladas fuera del periodo fresco y el trigo mostraba sus esquives para producirlo.
Ya en épocas del Dr. Francia se cultivaba el trigo, pero en muy escasa cantidad. La harina de trigo era consumida en muy poca cantidad y fuera de Asunción su consumo era nulo. En 1886 una pequeña cantidad de fideos (2,400 kg) y galletas (350 kg) fue llevada a Corumbá, Brasil, lo que sería la primera exportación del rubro.
Con la presidencia del Gral. Higinio Morínigo (7-09-1937 al 3-06-1948), el trigo fue difundido levemente. En décadas del 50 se lo intentó promover con los pequeños agricultores bajo el “Plan Familiar del Trigo” y quedó liquidado rápidamente por falta de tecnología, variedades sin adaptación y mal manejo del cultivo.
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El plan triguero siguió a los ponchazos hasta que en 1967 se iniciaron las buenas investigaciones a través del Gobierno Nacional adaptando y adoptando variedades casi enanas rendidoras y de ciclos cortos. Esto duró hasta 1971.
Siguieron los trabajos hasta 1990, en el que llega el aumento de la superficie cultivada y los rindes superaron los 2.000 kg/Ha. en regiones como Alto Paraná, Caaguazú, Canindeyú e Itapúa. En el año 1986, por primera vez, el Paraguay llegó al autoabastecimiento de trigo y en 1989 a exportar 225.000 toneladas de granos. ¡¡¡De importador a exportador!!!
Mención especial para los Ings. Agrs. “trigueros” como Hernando Bertoni, Ramón Artecona, José Maricevich, Félix Quintana, Raúl Torres, Emiliano Alarcón, Horacio Centrón, Ricardo Pedretti, Humberto Ruiz Díaz, José Schwartzman, Gregorio Bozano, Rosa Oviedo de Cristaldo, Iko Oka Obara, Graciela Cabrera, Héctor Cáceres, Francisco Vallejos, Héctor Causarano, Hugo Delgado, Sinforiano y Carlos Paniagua, Lidia de Viedma, Daniel Bordón, Egon Bogado, Juan Carlos Ramírez y otros.
El invernal trigo entró como cultivo de rotación con la soja estival y a formar parte de la buena agricultura extensiva y mecanizada. En décadas del 2000, el Ministerio de Agricultura (MAG) se desmenuza y aparecen los entes autárquicos, como el IPTA, a desperdigar presupuestos, pero productores, cooperativas y multinacionales desplazaron con éxito el rol que tenía el Estado a través del MAG.
El IPTA (Instituto Paraguayo de Tecnología Agropecuaria) podría dejar de recibir los G. 2.500 millones/año del sector privado para sus programas investigativos y nomás continuar siendo una institución improductiva y dedicada a seguir contratando “personal de confianza” para desterrar de la mesa paraguaya el trigo y el pan nuestro de cada día.
Los Bertoni no han de querer ver esta vergüenza...
caio.scavone@abc.com.py