FUERTE OLIMPO, Alto Paraguay (Carlos Almirón, corresponsal). Los compatriotas Carlos González (39) y Carlos Franco (47) fueron apresados por efectivos militares brasileños del destacamento Barranco Branco, ubicado a unos 2 kilómetros aguas abajo de esta comunidad. El hecho se produjo el viernes 16 alrededor de las 15:00 en territorio paraguayo, adonde ingresaron los uniformados del vecino país, lo que significa una violación de soberanía. Varios testigos presenciaron el apresamiento de los paraguayos que se produjo en pleno día.
La violación de frontera también lo confirma el gobernador del departamento, Alcibiades Rodríguez, con la nota enviada al canciller nacional Eladio Loizaga.
A pesar de este grave atentado contra nuestra soberanía que se viene repitiendo en esta parte del país, ante la vulnerabilidad de nuestra frontera, hasta la fecha no existe un pronunciamiento de formal protesta de parte de Gobierno paraguayo ante el de Brasil.
Ante esta situación, la comunidad Ishir de este distrito había cerrado un tramo del río Paraguay por espacio de 5 días en exigencia de libertad para ambas personas.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Los manifestantes liberaron el río tras un acuerdo pactado con representantes de la Cancillería nacional que se llegaron a esta localidad en la mañana del Miércoles Santo.
La Cancillería se compromete a contratar los servicios de un abogado particular que se encargue de trabajar en el proceso penal que se les sigue a ambos compatriotas que fueron acusados de tráfico de armas por encontrarse en poder de ambos una vieja arma de fuego de fabricación casera sin numero de serie, que era utilizada para posibles defensa de animales salvajes, ya que constantemente trabajan en los montes del Chaco.
Los consulados paraguayos en el Brasil deberán brindar asistencia permanente a los compatriotas y sus respectivos familiares.
En ninguna parte de este acuerdo se menciona algún tipo de protesta de parte de Cancillería por la actuación prepotente de los militares brasileños.
La venida a esta población de la delegación de la Cancillería, encabezada por el director de asuntos consulares, Juan Livieres, fue gracias a la gestión del intendente Sergio Cuéllar, quien logró conseguir un avión de la fuerza aérea y costear el precio del combustible de la aeronave.
