Óscar Chamorro Lafarja es propietario de la empresa SST Security Service Techology, anteriormente llamada Doram, ganadora de millonarias licitaciones para el servicio de seguridad privada en el Instituto de Previsión Social (IPS), pese a reiteradas quejas de supuestas manipulaciones del pliego de bases y condiciones en favor de esta firma.
Uno de los millonarios contratos en beneficio de Chamorro se firmó a fines de 2011, con Luis López González como presidente de IPS. El acuerdo, G. 31.275.263.214, surgió de la licitación 215.280. En la web de Contrataciones Públicas consta que el llamado a las empresas interesadas se publicó el 25 de octubre de ese año. Aparece como contacto Roberto Daniel Trabuco Quevedo, director de gestión de bienes y servicios del ente.
Pese a denuncias de que el pliego de bases y condiciones estaba direccionado a la participación exclusiva de empresas muy grandes, el proceso licitatorio continuó. Se presentaron tres oferentes, SIT Paraguay SA, Tapití SRL y Doram SACI. Los documentos indican que SIT tenía una oferta mayor que la de Doram, mientras Tapití, pese a ofertar un monto menor, fue descalificada. Así, el 22 de noviembre de 2011, menos de un mes después de la publicación del llamado, el consejo directivo de IPS declaró ganador a Doram, de Óscar Chamorro Lafarja.
Llamativo es, sin embargo, que quien en ese momento era director de gestión de bienes del IPS, Roberto Trabuco, es muy amigo del dueño de Doram (hoy SST), Óscar Chamorro Lafarja. Así lo indican varias fotos en las que se los ve compartiendo cervezas y viajes.
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Funcionario del Ministerio de Hacienda desde 1989, Trabuco fue síndico de IPS en 2013, luego salió de la entidad, pero volvió de nuevo en abril de 2018, como síndico interino del consejo de administración en representación de la Contraloría General de la República. El excontralor Enrique García lo nombró en el cargo pese a tener un proceso judicial por una supuesta estafa de más de G. 130 millones contra un banco de plaza. Actualmente Roberto Trabuco es funcionario de Hacienda, cuyo responsable, Benigno López, también fue presidente de IPS y en ese cargo benefició a SST, de Chamorro, con millonarios contratos.
Como síndico, Trabuco compartió con los actuales consejeros de IPS, responsables del llamado a licitación amañado realizado en abril, por el cual pretendían conceder a SST, de Óscar Chamorro Lafarja, un nuevo contrato, esta vez por G. 140.000 millones.
Debido al escándalo generado por las denuncias de manipulaciones en esta licitación, el proceso fue suspendido y está siendo investigado por pedido del presidente de la República, Mario Abdo Benítez.