Por 32 votos a favor (todos colorados) y 24 votos en contra, la Cámara Baja postergó por un mes el estudio del proyecto de ley que evidenció una fuerte resistencia principalmente de los cartistas y abdistas.
Las mujeres identificadas con el cartismo como Cristina Villalba, Cynthia Tarragó, Del Pilar Medina y Blanca Vargas de Caballero, excepto Perla de Vázquez, votaron en contra de la postergación de la norma. Un grupo de diputados efrainistas, de Avanza País y las mujeres coloradas se encargaron de defender la aplicación de la norma.
Un total de 63 diputados (de un total de 80) asistieron a la sala de sesiones, pero dos se abstuvieron y cinco quedaron callados.
El diputado Víctor Ríos (PLRA) acusó a las autoridades de la Iglesia (sin dar nombres) de operar fuertemente en contra del proyecto de ley que cuenta con media sanción del Senado. Expresó que la norma no tiene como fin generar una pelea de poder entre hombres y mujeres, sino que más bien el de generar mayor equidad, reivindicar y reconocer la lucha de las mujeres. La diputada Rocío Casco (Avancemos País) afirmó que si las mujeres representan el 50% de los empadronados, como un acto de justicia deberían ocupar ese porcentaje en cargos electivos o de jerarquía.
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Negó que el proyecto sea inconstitucional y mencionó que más bien la norma se basa en los artículos 46 y 48 de la Constitución que obliga al Estado a lograr la igualdad.
La diputada cartista Medina se mostró a favor del proyecto y lamentó la discriminación política de sus colegas. Mientras que el diputado Bernardo Villalba (ANR) fue el principal detractor del proyecto. Dijo que con la norma se institucionalizan las listas sábanas y no se garantiza el acceso a la educación y al trabajo a las mujeres, y que la norma es impracticable.