Christ accedió de inmediato y una aeronave de la Aviación trasladó al político liberal Atilio Martínez Casado y a Torreblanca, también del mismo partido, a Gral. Resquín, localidad de San Pedro, a participar de una reunión del PLRA, en la que varios afiliados a este partido pidieron cargos de la administración pública, según los datos.
El empleo del helicóptero para un encuentro partidario no pasó desapercibido y surgieron las preguntas. El primero en dar explicaciones fue Christ Jacobs, quien señaló a la prensa que Torreblanca solicitó el aparato de la Aviación para una misión oficial. El contralor Velázquez respondió que él desconocía actividad de la Contraloría en Gral. Resquín y que además cualquier nota a nombre de la institución debía llevar su firma. El presidente Franco reaccionó con una orden que establece que en adelante para cualquier pedido de helicóptero o uso de otra infraestructura de las FF.AA. se tendrá que solicitar con una antelación mínima de 72 horas.
El nuevo episodio del empleo indebido de recursos del Estado en cuestiones político-partidarias, que involucra al gobierno liberal, aparentemente estaba en camino a la impunidad, pero el contralor, de filiación oviedista, ahora envía la nota a Franco a fin de tomar medida, según asegura. Asimismo, abunda en detalles legales de que únicamente en su ausencia la subcontralora puede firmar documentos. Por otra parte, el jefe de la Aviación también había remitido una nota al contralor para solicitar que aclare lo ocurrido con el helicóptero ante las publicaciones periodísticas.