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Franco se reunió ayer al mediodía con dos diputados brasileños del Frente Parlamentario Evangélico: João Campos (presidente) y Roberto de Lucena (vicepresidente), quienes prometieron hacer lobby con Dilma Rousseff para que el gobierno de Franco sea reconocido. El encuentro se llevó a cabo en el Centro Familiar de Adoración, situado en Villa Aurelia de nuestra capital.
Para que Franco se reúna con los diputados brasileños tuvo que asistir al culto de Acción de Gracias de la Iglesia del Centro de Adoración junto al titular del Congreso, Jorge Oviedo Matto; el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Víctor Núñez, y el titular de Diputados, Víctor Bogado. Participó también del acto ecuménico el titular de Unace, Lino Oviedo, y el presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Bogado.
Durante el acto ecuménico, Franco recibió un abierto respaldo religioso y político a su gestión ante un público de unas 7.000 personas. El diputado Campos dijo que paraguayos y brasileños “somos hermanos” y se comprometió a resolver el distanciamiento entre los dos países (tras la destitución del presidente Fernando Lugo, el 22 de junio pasado). Los dos diputados brasileños pertenecen al Frente Parlamentario del Brasil, que está conformado por 76 diputados y tres senadores cristianos.
Dilma y Chávez
El titular de Unace, Lino Oviedo, manifestó ayer que el gobierno de Dilma está comenzando a tener problemas internos y no tiene sentido seguir distanciado de Paraguay. Por su parte, el mandatario venezolano Hugo Chávez es un dictador como el Gral. Alfredo Stroessner.