Luego de la reunión que mantuvo con Wiebe, Obdulia Florenciano de Morínigo mencionó nuevamente que se siente abandonada por el Gobierno. Evidentemente emocionada dijo que cada día las autoridades se van alejando de su familia. Indicó que uno de sus hijos está enfermo (depresión). Casi gritando se preguntó dónde están el Presidente de la República, el ministro del Interior y el comandante de la Policía Nacional.
Se quejó que las autoridades ni siquiera se preocuparon en traerla a Río Verde para hablar con el joven liberado. “Es terrible eso. Como mamá estoy dolida, tuve que recurrir a amigos para que nos hagan llegar a la casa del joven menonita. Es horrible que no tengamos la atención de las autoridades, solo porque somos pobres”, sostuvo. También comentó que mañana llegará hasta la fiscalía de Derechos Humanos, ubicada en Asunción, para denunciar el abandono que sufre su familia.
Así también, indicó que ya ha pasado mucho tiempo del secuestro de su hijo. “Me han hecho sufrir demasiado ya, les pido (al EPP) una prueba de vida de mi hijo y su libertad”, señaló casi llorando.
Sobre la esperanza que tenía de contar con nuevos datos sobre su hijo, lamentó que Franz Wiebe no haya visto o escuchado alguna noticia de su hijo durante su cautiverio.
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Al fiscal antisecuestro Joel Cazal Cristaldo, Obdulia lo trató de una persona estúpida. Afirmó que el funcionario la dejó ante la ciudadanía como una mentirosa luego de que haya realizado una denuncia en la que mencionaba que supuestamente Rubén Darío López, alias Loro, fue a visitar a un hijo suyo al hospital regional de Pedro Juan Caballero,
Loro López es un miembro del EPP y es buscado por la justicia por varios delitos. La madre del suboficial de Policía, que prestaba servicio en el puesto policial Nº 7 en el departamento de Concepción, dijo también que Franz Wiebe le comentó algunos detalles de su cautiverio. “Estuvo encadenado y los ojos vendados, y prácticamente no habló con nadie, dos personas le cuidaban en todo momento y el lugar donde permanecía estaba alejado del campamento principal de los secuestradores. Caminó mucho para que lo liberen”, aseguró.
LOS TRES CAUTIVOS
El suboficial segundo de Policía Edelio Morínigo Florenciano, de 27 años, nacido el 9 de mayo de 1989. Lleva secuestrado 970 días, desde el 5 de julio de 2014, cuando fue capturado en la estancia “Macchi Cue” de Arroyo de Oro, en Horqueta. Para liberarlo, el EPP exige la excarcelación de seis miembros de la banda que están presos.
El colono menonita Abrahán Fehr Banman, de 37 años, nacido el 11 de diciembre de 1979. Lleva secuestrado 571 días, desde el 8 de agosto de 2015, cuando fue capturado en la colonia Manitoba de Tacuatí. El EPP exige 500.000 dólares. Su familia pagó 100.000 dólares a unos avivados.
El ganadero Félix Urbieta Ramírez, de 67 años, nacido el 11 de febrero de 1950. Lleva secuestrado 140 días, desde el 12 de octubre de 2016, cuando fue capturado en su estancia “San Francisco” de Horqueta. El EPP exige 350.000 dólares. Su familia consiguió reunir hasta ahora US$ 150.000.