Encina explicó en el programa Crimen y Castigo que el 8 de mayo pasado, efectivamente, los agentes ahora detenidos le comunicaron por nota que iban a hacer tareas de inteligencia, pero en una zona cuyas coordenadas dan a 48 kilómetros de la estancia allanada ayer.
El funcionario aclaró que si las coordenadas correspondían al sitio intervenido por la Senad, los policías ahora apresados no podían ejecutar ninguna operación como la que dijeron que la estaban haciendo, ya que antes debían haber pedido una orden de allanamiento que debía emitir un juez.