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El Instituto de Previsión Social (IPS) también paga el famoso “premio” pero bajo el concepto de “subsidio”, equivale al décimo cuarto salario anual y sería como el cuestionado “aguinaldo extra” que perciben los privilegiados asalariados de la función pública.
Sin discriminación y en medio de una anarquía reinante, la previsional gastó G. 59.000 millones, un poco más de US$ 10 millones en enero del 2016, en concepto de subsidio o premio. Mientras que los asegurados sufren las miserias de los servicios, los administradores no escatiman recursos para beneficiar a funcionarios.
El “subsidio” de los administrativos costó G. 8.800 millones y el los médicos G. 50.400 millones.
Según explicó el presidente del IPS, Benigno López, el citado desembolso es por “el Contrato colectivo de condiciones de trabajo que se aplica hace más de 20 años. Es un subsidio reconocido hace años y un incumplimiento trae aparejada una huelga por su violación”. Más que la presión gremial, no existe que obligue el sideral desembolso.
López también confirmó que los contratados no perciben el beneficio y tampoco los “indisciplinados” y que la autorización del pago es atribución del Consejo del IPS. Sin embargo, en la lista de los beneficiados figura la doctora Ana Teresa Halaburda pillada inventando 62 pacientes en tres domingos de guardia que no trabajó.
Perla Canata, flamante médica que hace guardia con el novio en el auto, también cobró la citada bonificación. Al ser consultado sobre el premio a estos doctores, el presidente de la previsional refirió que se están haciendo evaluaciones con cada jefe. Era más discrecional, ahora es más reglamentado”.
Nuestro diario constató que el planillerismo también es costumbre de algunos funcionarios de la caja central, edificio donde se encuentran las máximas autoridades (presidente y consejeros). La rabonería, “mal de muchas instituciones públicas”, según justificaron voceros de la previsional, tiene varias modalidades en el ente.
El reposo es el argumento más utilizado para las ausencias. Los administrativos del IPS que deben cumplir un horario de 7:00 a 14:00 o de 8:00 a 15:00, en su mayoría trabajan como mucho 5 horas. Después de la marcación ocupan la mañana para desayunar en las inmediaciones, posteriormente hacen gira para comprar remedios para el tradicional tereré, otros van de compras o simplemente salen a dar unas vueltas con las amigas. Después viene el largo almuerzo en las cercanías del edificio y luego la hora de salida.
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