Caballero se presentó ayer ante los fiscales Francisco Torres y Alcides Corvalán porque estaba convocado solo como testigo. El exministro del Interior aparece en numerosos audios con González Lippmann, exsecretario del exsenador Óscar González Daher, negociando casos y aprietes a fiscales.
Pese a esto, iba a quedar como un testigo. Sin embargo, todo cambió ayer luego de serios cuestionamientos al fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, por la lentitud de la intervención que provocó que se hurtaran documentos del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, y por la falta de designación de fiscales con más experiencia.
Ante esta situación, Díaz Verón decidió nombrar como coadyuvante al fiscal Martín Cabrera, de la Unidad de Delitos Económicos y Anticorrupción, con la salvedad de que puede actuar en forma conjunta o separada de sus colegas. Según trascendió, Cabrera tiene el criterio de convocar a Caballero a una audiencia indagatoria, no testimonial. Ante los medios de prensa, el exministro no quiso hablar en un primer momento, luego dijo que no se referirá a los audios al ser “ilegales” y dio a entender que alguien “imitó” su voz. “Una persona que imita tu voz, en cualquier momento puede instalar cualquier cosa. Los audios fueron conseguidos de manera ilegal”, dijo.
Ayer, el fiscal partidario Pedro Candia pidió la expulsión de Caballero del padrón liberal.
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Fiscala declaró
La fiscala Karina Giménez declaró como testigo ayer. La agente –que está suspendida en el cargo– saltó en los primeros audios de negociaciones con Fernández. Fue conocida por amenazar con “trancar” un caso que involucraba a Ramón González Daher. Negó que haya recibido presiones y que forma parte de la rosca que negociaba causas.
