El ministro Benigno López fue consultado ayer sobre cómo ve el Gobierno la presencia de fiscales brasileños de Río de Janeiro, que llevan adelante la investigación del Lava Jato contra el prófugo Darío Messer, “hermano del alma” del exmandatario Horacio Cartes.
Los investigadores de Río de Janeiro buscan a Messer por el millonario lavado de dinero que el citado “doleiro” trajo y lavó en Paraguay. Estimaron que fue de unos US$ 100 millones.
Benigno López consideró positiva la presencia de los fiscales José Vagos y Rodrigo Timoteo. Consultado si afecta la imagen ante el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), quien en los próximos meses hará un examen a Paraguay sobre la lucha contra el lavado de dinero. “Creo que fortalece, porque quiere decir que se está trabajando entre dos países, dos jurisdicciones para combatir un delito que es común, transaccional y que afecta a las fronteras. Entonces, no creo que no pueda perjudicar en nada, al contario, puede colaborar al fortalecimiento de la institucional”, expresó.
Al insistírsele que la Policía Nacional no logra dar con el paradero de Messer, el ministro de Hacienda respondió que esa “es una situación normal”. Dijo que los organismos de seguridad lo “estarán buscando, conforme a las órdenes judiciales”.
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Este jueves último, los fiscales brasileños José Vagos y Rodrigo Timoteo se reunieron con sus colegas paraguayos de Delitos Económicos y Anticorrupción René Fernández y Liliana Alcaraz, para intercambiar información sobre el caso de Darío Messer que se inició en el Ministerio Público Federal de Río de Janeiro hace tres años.
Esta es la segunda reunión de cooperación que tienen estos fiscales: la primera se hizo en octubre del año pasado en Brasil y, a decir de los investigadores, se cruzaron informes muy importantes para ir entendiendo la estructura criminal de lavado de dinero que lideraba Messer en el Brasil.
El 4 de mayo del año pasado se dictó la primera orden de captura contra Darío Messer, el socio comercial de Cartes. Luego de eso se reiteraron cuatro veces más la misma orden y se dictó la rebeldía.
