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El jefe comunal comentó que luego de los últimos hechos violentos, como el ataque a la estancia La Gringa y el asesinato del ganadero alemán Robert Natto y su esposa Érika Reiser, el miedo resurgió entre los mismos trabajadores de la zona. “He hablado con algunos trabajadores y ya están queriendo irse”, dijo.
“Existen compatriotas que están queriendo mudarse a otras ciudades, por la tragedia y por los hechos que tenemos”, dijo. Aseguró que esta tendencia puede ir aumentando, sobre todo porque el EPP se está mostrando aun más fuerte y la ineficiencia de los organismos de seguridad también crece.
El intendente señaló que se vive un ambiente de terror en el norte, por las últimas incursiones del EPP.
Cuestionado
Wyder Ramírez es un cuestionado intendente de Azote’y, ya sea por sus adversarios políticos, que lo acusan de presuntos malos manejos, y por agentes de seguridad. A poco del secuestro del joven Arlan Fick en abril del año pasado, un informe de inteligencia remitido a la cúpula de la Policía, en Asunción, revelaba que el jefe comunal participó del velatorio del miembro del EPP abatido Bernardo Bernal Maíz (20), alias “Coco”, en el asentamiento Nueva Fortuna de Kurusu de Hierro. “Coco” fue muerto en el enfrentamiento con la Fuerza de Tarea Conjunta en la noche en que secuestraban a Arlan.