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Asegurados que esperan horas sentados al teléfono para conseguir turnos dentro de varios meses, hospitales cuyas infraestructuras se caen a pedazos, personal de blanco sobrepasado en su capacidad de atención y medicamentos que escasean.
El IPS afronta un sinfín de cuestiones urgentes para satisfacer las necesidades de sus asegurados.
A todo ello hay que sumar que el ente podría colapsar en menos de 20 años, de acuerdo a un estudio presentado el año pasado y publicado por ABC Color.
A pesar de toda esta situación, el ente insiste en pagar unos G. 140.000 millones para adquirir servicios de seguridad y vigilancia, para lo que contratará a las firmas SST Security Service Technology SA y Bullers SA, ambas vinculadas a Óscar Chamorro Lafarja, hijo del exdiputado colorado José Chamorro.
Grosera sobrefacturación
Solo en el lote de seguridad física, el IPS destinará cerca de G. 120.000 millones de los asegurados para entregar a las empresas de la familia Chamorro.
Comparando otros contratos con entidades públicas, salta a la luz que el IPS estará pagando casi un 40% de sobreprecio.
Al SNPP, la firma SST le cobra G. 6.168.659 al mes por cada guardia. El contrato es de 24 meses y debe proveer un total de 74 personales de custodia.
En el caso del IPS, SST cobrará G. 117.284.157.418 por la provisión de seguridad física al IPS. El contrato tendrá una duración de 18 meses y la firma deberá proveer 673 guardias. IPS terminará pagando G. 9.681.703 por cada guardia de seguridad. Entonces, la previsional pagará G. 3.513.086 de más por cada guardia.
No cumple con trabajadores
Como si un pliego direccionado y un contrato con millonarios sobreprecios no fueran suficientes, el IPS volverá a contratar a una empresa que ni siquiera cumple con sus obligaciones ante la previsional.
La firma vinculada a los Chamorro también posee un jugoso contrato con el lado paraguayo de la Entidad Binacional Yacyretá.
En febrero pasado, trabajadores elevaron una nota al director paraguayo de la entidad, Nicanor Duarte Frutos, para pedirle su intermediación a fin de que la empresa respete los derechos laborales.
Según publicaciones de nuestro archivo, los trabajadores denunciaron que cumplen turnos de 12 horas durante la semana, y 18 horas los fines de semanas, lo que implica que no se cumplen los parámetros establecidos en el Código Laboral paraguayo, de ocho horas diarias.
Además, indicaban que tienen un salario mensual de G. 2.650.000, sin recibir el 30% de plus salarial por servicio de trabajo nocturno. Tampoco perciben bonificaciones por horas extras de fin de semana, y también manifiestan que solamente cuentan con tres días libres, en lugar de cuatro.
La nota también mencionaba que la citada empresa privada les descuenta mensualmente el aporte para el IPS, pero que no estaría efectivizando el pago a la previsional, razón por la cual no pueden usufructuar los servicios de salud.
Añadían que tampoco contaban con copia alguna del contrato de trabajo para que puedan tener conocimiento de las cláusulas determinadas en el mismo.
No es la primera vez
La denuncia de febrero último no fue la primera que trabajadores presentaron contra la firma SST.
Ya en 2012, la firma fue denunciada por supuestamente explotar a sus funcionarios, a los que les pagaba apenas G. 1.400.000 y les obligaba a cumplir horarios de 12 horas continuadas. Sin embargo, la empresa declaraba al IPS que pagaba a cada uno de sus funcionarios G. 3.100.000.
También fue denunciada ante el Ministerio Público por la retención arbitraria de salarios a más de 1.000 de sus funcionarios.
juan.lezcano@abc.com.py