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La derrota electoral de su candidato y los sucesivos golpes políticos que recibieron personajes cercanos al entorno presidencial lo dejan en una posición muy debilitada de cara a las elecciones generales y para el próximo periodo presidencial.
Las denuncias contra allegados al oficialismo amenazan continuar y empeorar la imagen negativa del Mandatario, poniendo en riesgo inclusive la estabilidad de su gobierno.
Apenas unos días después de consumada la derrota de Santiago Peña frente a Mario Abdo Benítez y pese al triunfo de la lista para el Congreso, ya se comenzó a evaluar en el entorno cartista la conveniencia de que asuma como senador en el próximo periodo. Pero, pese al ambiente adverso que tendrá en el Congreso, Cartes necesita contar con fueros por las denuncias contra sus empresas y contra él mismo que pueden comenzar a surgir una vez que deje el Ejecutivo.
De acuerdo a algunas versiones, en el sector de la oposición ya se está gestando una serie de movidas judiciales y políticas para dificultar la incorporación de Cartes al Senado. Por un lado, impugnarán su candidatura basados en el artículo constitucional que señala que no puede ser senador activo ya que la Carta Magna, en forma taxativa, en su artículo 189 dispone que los expresidentes de la República electos democráticamente “serán senadores vitalicios”.
Como ya existe el antecedente de un fallo de la Corte Suprema favorable al expresidente Nicanor Duarte Frutos por el mismo tema, la siguiente jugada será dentro del campo político y consistirá en intentar impedir que pueda jurar como senador.