La esposa e hijos de Díaz Verón están a un paso de ser imputados

Tras serios cuestionamientos por el lento avance y la falta de imputación, el fiscal José dos Santos resolvió convocar a la esposa y los hijos de Díaz Verón por la constitución de la firma Canto Rodado SA.

El agente fue recusado luego de la citación por la propia María Selva. En este caso ya se apartó la fiscala Yolanda Portillo, y ayer la fiscala adjunta de Delitos Económicos Alba Rocío Cantero nombró interina a Josefina Aghemo.

La citación a la esposa e hijos de Díaz Verón, para el viernes 16 de febrero, se da ante los serios indicios de la comisión de un hecho punible, el de producción mediata de documento público de contenido falso.

Esto es así porque, según la escritura de protocolización de Canto Rodado, María Selva puso G. 1.500 millones en efectivo y sus hijos Yerutí y Alejandro G. 500 millones cada uno, según las escrituras públicas, con lo que se llegó a los G. 2.500 millones. Sin embargo, para eludir a la Seprelad se consignó que la firma fue integrada con pagarés, un hecho bastante irregular tratándose de una sociedad anónima que debería tener capital integrado.

Por esta circunstancia, Dos Santos tomó la determinación de citar a declarar en indagatoria a los familiares del fiscal general con autopermiso.

Sin embargo, el agente aclaró antes de ser recusado que ese hecho punible no se contrapone con enriquecimiento ilícito, por lo que a medida que avance la pesquisa podría encontrarse suficientes elementos también con relación a la injustificada fortuna de Díaz Verón.

Además de la situación de la empresa Canto Rodado, se investiga cómo es que María Selva tiene acciones en otra empresa, Salty River SA, pero a través de Canto Rodado. 

A su vez, se sospecha de millonarias inversiones en una estancia de la familia de María Selva, de 8.000 hectáreas en el Chaco.

El propio Díaz Verón intentó justificar en vano la solvencia de su esposa con una indemnización del Fondo Ganadero, que era de poco más de G. 200 millones. Sin embargo, la mujer hizo inversiones por G. 3.000 millones. 

Autos lujosos cero kilómetros, fiestas fastuosas y viajes soñados también revelarían el caudal ilícito de los Díaz Verón.