Medio ambiente está siendo desgastado y arruinado

Mons. Pedro Jubinville, obispo de San Pedro Apóstol, dijo que la deforestación desfigura al Paraguay. Nuestra herencia será un medio ambiente desgastado, degradado y arruinado, enfatizó.

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CAACUPÉ, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). Monseñor Pedro Jubinville, obispo de San Pedro Apóstol, inició su homilía en el octavo día del novenario en honor de la Virgen de Caacupé diciendo que lamenta que se esté legando un medio ambiente contaminado, desgastado y arruinado a las generaciones futuras. Los problemas medioambientales son muy serios en el país, indicó.

“Por más energía limpia que tengamos y algunas hectáreas de eucaliptos recién plantados, la deforestación ya desfiguró nuestro país. La basura nos está sumergiendo y estamos en un proceso acelerado de deterioro de los suelos y de contaminación del agua”, enfatizó.

El obispo subrayó que Paraguay está en un momento crítico y se ha convertido en un ejemplo mundial de muy mala gestión del medio ambiente. No se puede seguir descartando recursos naturales y acumulando un inmenso basural, indicó.

En otro momento de su prédica, el obispo refirió que no se puede ni se debe tratar a la gente como descartable. En ese sentido, Mons. Jubinville señaló que nuestro sistema económico tiene su propia lógica; ohorei hese (avanza sin reglas claras). Pero no se puede seguir consumiendo las riquezas del planeta como si fueran ilimitadas, y menos aún seguir acumulando riquezas de manera tan desigual, insistió.

Asimismo, Mons. Jubinville manifestó que no puede haber un buen sistema de salud mientras continúe la corrupción en las instituciones del Estado, las mentiras, los odios y los rencores entre los actores del Gobierno. Tampoco habrá ecología renovada ni economía solidaria mientras siga el egoísmo y el afán de lucro, añadió.

En otro pasaje de su prédica, alentó a las organizaciones sociales a luchar por sus derechos y exigir que se corrija lo que está siendo mal hecho en nuestro país.

“Saludemos hoy a todas las organizaciones que luchan por el bien común e incluyen en sus objetivos el esfuerzo por conseguir la sanación de nuestra tierra y una economía más sostenible y solidaria. Todos debemos participar en esas organizaciones, con nuestros intereses y talentos, para ayudar a nuestra sociedad a ser más sana y viva”, concluyó.

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