La sesión extraordinaria, presidida por Jorge Oviedo Matto (Unace), fue convocada para tratar dos proyectos: uno que declara emergencia agrícola y el otro para la rehabilitación financiera de los pequeños productores, que preveía un susbsidio del Estado hasta G. 51 millones por propietario. Al principio se calculó que la condonación solicitada alcanzaba US$ 34 millones.
Sin embargo, no se pudo comenzar el estudio dado que los proyectos que tocan el presupuesto general de gastos, requieren obligatoriamente del dictamen de la comisión de Hacienda.
El senador Carlos Filizzola (Frente Guasu) interpuso la solución reglamentaria prevista que era que la plenaria se constituyese en comisión para dictaminar. Necesitaba para el efecto la mayoría absoluta, 23 votos, pero solamente obtuvo 20, ya que no acompañaron los cartistas y estaban ausentes algunos senadores llanistas.
El senador Miguel Abdón Saguier planteó un cuarto intermedio para dictaminar, pero dicha salida no correspondía, de acuerdo al reglamento.
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El senador Sixto Pereira (Frente Guasu) dijo que tratarán de acelerar los trámites para volver a tratarlo en la brevedad, lo que podría darse el martes de la próxima semana.
El proyecto que iba a tratarse contempla que el Estado subsidie las deudas vencidas de productores de la agricultura familiar campesina nucleados en organizaciones, que posean fincas que no excedan de un máximo de 30 hectáreas, hasta 25 salarios mínimos mensuales (alrededor de G. 50 millones) por productor. El subsidio contempla intereses y cargas financieras de cualquier naturaleza.
También se establece que los beneficios de la ley no privarán a los beneficiarios del derecho a ser sujetos de nuevos créditos. Un artículo autoriza también al MAG para verificar que el beneficiado sea pequeño productor y que su deuda se haya generado para la inversión productiva.
El otro proyecto de emergencia de la agricultura familiar habilita a una asistencia de todas las instituciones del Estado a los pequeños productores.