“Siempre habrá un 13 de enero” había dicho quien llegó a ser vicepresidente de la República, Luis María Argaña (asesinado en 1999), semanas después del golpe de Estado del 2 y 3 de febrero de 1989 que derrocó a la dictadura del general Alfredo Stroessner. Argaña aludía al 13 de enero de 1947, fecha en la que el general Higinio Morínigo conformaba su gabinete con políticos colorados, lo que fue un hito para el Partido Colorado, y su posterior retorno al poder a finales de la década del 40.
Al respecto, Alliana declaró: “Siempre habrá un 13 de enero para la justicia social, no venir un grupo de parlamentarios a truncar este sueño. Hemos juntado 366.000 firmas, gracias a este ejército de colorados y no colorados. Esperemos mantener la bandera del partido colorado en el Palacio de López” (sic).
Según Alliana, solo el 10% de la cantidad de firmas recolectadas y entregadas al TSJE son de funcionarios públicos, y que del total, “un poco más del 70% son afiliados al Partido Colorado”. El diputado oficialista aseguró que “hay muchas personas no afiliadas también a la ANR” que acompañaron la campaña de reelección del presidente Horacio Cartes.