Nombran políticos, amigos y masones en Contraloría

El nuevo contralor general de la República, Enrique García, viene realizando cambios en direcciones y departamentos del organismo superior de control. Varios de los nombrados y promocionados tienen fuertes vínculos con políticos y también con organizaciones de la masonería.

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Entre los más llamativos cambios y promociones realizados por el contralor

Enrique García, a poco de asumir el cargo, se menciona, entre otros, a César Bernardino Núñez Alarcón como titular de la Dirección General de Asuntos Jurídicos de la CGR. Reemplaza en el cargo a Diego Antonio Marcet Oviedo, ligado al senador colorado Mario Abdo Benítez. Marcet fue designado secretario general de la Contraloría, en reemplazo de Alfredo David Barúa Mosqueda, de extracción liberal.

Núñez Alarcón, en julio de 2011, había sido nombrado por el entonces presidente, Fernando Lugo, para estar al frente de Migraciones. Está muy vinculado a organizaciones de la masonería internacional. Actualmente es vicegran maestro de esa organización y es de máxima confianza del contralor Enrique García.

Núñez se había postulado a contralor general y, en su exposición ante los senadores, había dicho que la Contraloría era “un ente de extorsión”, y que las víctimas eran preferentemente intendentes y gobernadores a la hora de presentar rendición de cuentas de recursos públicos. En el año 2005 se desempeñó como auditor de la Contraloría.

María José Ocampos Pérez fue designada en la Dirección de Recursos Sociales, en reemplazo de Cirilo Durañona Macchi. La misma es esposa del fiscal Édgar Sánchez, considerado maestro de una de las organizaciones de la masonería en nuestro país.

Jacinto Galeano González fue nombrado titular de la Dirección de Dictámenes y Procedimientos Legales, dependiente de la Dirección General de Asuntos Jurídicos. Este está fuertemente vinculado a los senadores colorados del grupo “Colorado Añetete”, Mario Abdo Benítez, Enrique Baccheta y Silvio Ovelar, con quienes aparece en algunas fotografías a las que tuvimos acceso.

Arnaldo Javier Zárate Pino es cuñado del senador colorado oficialista Juan Darío Monges. Fue nombrado director general de Control de la Administración Central de la CGR, en reemplazo de Tatiana Miño Worobiej. Esta fue promovida al frente de la Dirección de Comunicación (Dircom), sustituyendo a Ricardo Roa Orué, quien quedó desvinculado de la institución contralora.

Domingo Germán Quiñónez, nombrado como titular de la Dirección General de Control Interno de Organismos Departamentales y Municipales, reemplaza en el cargo al abogado Tomás Servín Marín.

Quiñónez es hermano de la fiscala Sandra y de la ministra Anticorrupción, Soledad. Es recomendado del senador colorado disidente Julio César Velázquez. También es dirigente de la seccional colorada de Lambaré. Quiñónez ocupó el cargo de director de administración y finanzas en el Ministerio de Educación. Estando en esta institución fue denunciado por algunas irregularidades detectadas por la propia Contraloría General.

Liberales y oviedistas

Los últimos nombramientos y promociones que realizó el contralor general de la República Enrique García en la institución generó disgusto en funcionarios, especialmente de aquellos afectados por las medidas. El enojo manifestado es porque la mayoría de los nombramientos se realizan por recomendaciones de políticos y no precisamente por la idoneidad de las personas. Entre los que están disgustados se mencionan a funcionarios vinculados a partidos políticos como el PLRA y también del Partido Unace. De acuerdo a comentarios recogidos entre el funcionariado del organismo superior de control, muchos de ellos se sienten perseguidos por el actual contralor general.

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