Padres de menor plagiado aguardan la prueba de vida

Los padres del adolescente Franz Wiebe Boschman (17), secuestrado el pasado 27 de julio en la colonia Río Verde, aguardan con ansias la prueba de vida que debe enviar el autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), después de que cumplieron una de las exigencias de los secuestradores.

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Se trata de la lectura del comunicado que el grupo armado habían dejado el día del plagio. Tras la lectura de la nota, los padres aguardan la prueba de vida prometida para así proseguir con las negociaciones que buscarán la liberación del menor, que estaba trabajando en una propiedad de un vecino para tratar de ayudar económicamente a su familia.

El EPP había entregado las notas la tarde en que se produjo el plagio al menonita Pedro Peters, un joven sordomudo que también se encontraba trabajando con Wiebe, cuando irrumpieron los criminales en un sector de la estancia “La Yeya” y que fue tomado de rehén por unas horas.

En una de las misivas entregadas los secuestradores redactaron las exigencias que debían cumplir los familiares del menor para que sea liberado, en tanto que en la otra nota hacía referencia al comunicado que leyó el viernes último ante los medios de comunicación por un líder de la comunidad menonita de Río Verde.

Dos secuestros

Con el transcurrir de los días, los colonos que empezaron a poblar la zona en el año 1974 se muestran cada vez más sorprendidos ante el nuevo secuestro que afecta a otro menonita.

En el primero, resultó víctima Abrahán Fehr Banman (36), quien el próximo 8 de agosto cumplirá un año en cautiverio.

Lo que les llama la atención es que hayan secuestrado a un menor cuya familia no posee un caudal económico importante.

Quince días

El plazo que dio la banda criminal autonombrada EPP a la familia de Franz Wiebe fue de quince días. Ese lapso de tiempo exigido es para pagar el dinero y luego se tendría la liberación del joven. De acuerdo a lo escrito por los captores, los días ya empezaron a correr desde el mismo momento en que se materializó el secuestro, es decir, desde el miércoles 27 de julio del presente año.

El plagio se perpetró cuando el grupo armado irrumpió, en momentos que los colonos realizaban la cosecha de maíz y prendieron fuego a un tractor y un camión.

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