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Al tomar intervención, Casati solicitó a la fiscala Susy Riquelme la realización de una pericia contable de los bienes de Cárdenas Nunes. El defensor alega que la fiscala Natalia Fúster al momento de imputar por lavado, no realizó la pericia contable que demuestre razonablemente que el patrimonio fue conseguido ilícitamente.
Para que haya lavado de dinero –por el que está imputado Cárdenas Pappalardo–, previamente tuvo que haber el enriquecimiento ilícito, lo que a criterio del defensor no se demostró.
Fúster fue recusada por Cárdenas Nunes a través de su abogado defensor Rodolfo Gubetich. Alegó “enemistad manifiesta” porque la fiscala supuestamente “omitió maliciosamente la disposición de sometimiento de la defensa al proceso, faltó al análisis y desconoció documentación oficial (presentada por su defensa)”.
Cárdenas Nunes fue imputado y se solicitó al juzgado prisión preventiva. También la fiscala Fúster ordenó la detención del extitular del Indert. Para el 5 de diciembre está marcada la audiencia de imposición de medidas ante el juez penal de garantías Humberto Otazú.
Cárdenas Nunes hasta ayer no se dio por detenido.
También fueron imputados, pero por lavado de dinero, otros dos hijos de Cárdenas Nunes. Se trata de María Alexandra Cárdenas Pappalardo y Allan Israel Cárdenas Rodríguez, para quienes la Fiscalía solicitó medidas alternativas a la prisión.
La imputación fiscal tuvo en cuenta 10 años en que Cárdenas Nunes estuvo en la función pública. De 2008 a 2013 como diputado y de 2013 a 2018 como presidente del Indert. De acuerdo con los indicios recabados, el ahora imputado no podría justificar G. 2.644.701.082. Tuvo un ingreso de G. 5.364.894.000 y egresos de G. 8.009.595.082.