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El diputado Éber Ovelar (ANR, disidente) explicó que la ley aprobada funcionará como un marco de regulación para la investigación científica y el uso médico de la planta de cannabis y sus derivados. Se refiere al aceite de cáñamo para que las empresas farmacéuticas y laboratorios nacionales industrialicen la planta citada.
“Nosotros estamos importando el aceite de cannabis que aproximadamente está entre G. 1.600.000 a G. 1.800.000 el pote del aceite. Podría reducirse a un cuarto del valor real”, explicó.
El diputado Bernardo Villalba (ANR, cartista), en su intervención durante la sesión ordinaria de ayer, indicó que la producción de la planta debe ser estrictamente controlada. “No es que ahora a partir de esta ley, cualquiera va a ir en su campo y va a empezar a cultivar libremente la marihuana, no es así”, sostuvo.
Lo que la norma dice
La ley que crea el Programa Nacional para la Investigación médica y científica del uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados (PROINCUMEC) establece que el Servicio Nacional de Calidad Vegetal y de Semillas (Senave) y la Secretaría Antidrogas (Senad) serán los encargados de controlar la producción.
Solo podrán cultivar la Dirección de Investigación Científica de la UNA, el Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA), el Instituto Forestal Nacional (INFONA), el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) y los laboratorios farmacéuticos habilitados. En otro artículo, establece que el Estado promoverá la producción e industrialización de medicamentos derivados del cannabis en laboratorios de instituciones públicas para su uso terapéutico, y esta producción será de acceso gratuito para los pacientes inscriptos en el Registro Nacional de Usuarios.