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El obispo del Vicariato Apostólico del Chaco lamentó que en este momento no exista dinero para reparar el camino que conduce a la escuela internado de Ñu Apu’a, donde estudian los hijos de peones e indígenas de la región. El centro educativo se encuentra en pleno monte chaqueño, a 90 kilómetros del casco urbano de Fuerte Olimpo.
“Las autoridades no demuestran ese compromiso de cumplir con sus responsabilidades de servidor público, cargo al cual se comprometieron. Estamos a días del inicio de las actividades escolares del presente año, y de nuevo tropezamos con esta realidad de los precarios caminos”, cuestionó el obispo.
Destacó que la citada escuela cumple un rol de suma importancia en la formación de niños y jóvenes de la zona, y se encuentra regenteada por el Vicariato del Chaco. Afirmó además que existe toda una organización para mantener al pueblo en la pobreza para que así las personas siempre dependan de las autoridades.
“Este tipo de problemas demuestran la urgencia por cambiar la realidad actual de nuestro país, lo que impide el desarrollo de las comunidades. Hasta la fecha no tenemos proyectos o programas de los actuales candidatos del departamento que buscan ocupar un cargo electivo en los comicios de abril”, mencionó Escobar finalmente.
Monseñor Escobar, a quien le toca uno de los departamentos menos desarrollados de nuestro país, realiza siempre este tipo de reclamos. Los principales déficits en el Alto Chaco están en vialidad. Es el único departamento que no cuenta con un solo metro de asfaltado. En el sector de salud pública, faltan profesionales médicos, equipos, laboratorios y móviles básicos. Y se suman las carencias en educación.