Loizaga mantuvo ayer un encuentro con la comisión directiva de la Liga Parlamentaria de Amistad Paraguay-Japón, presidida por el diputado Takeo Kawamura. Fue en el marco de un desayuno de trabajo que se llevó a cabo en Tokio.
La Liga Parlamentaria japonesa agrupa a senadores y diputados que mantienen en su agenda las cuestiones de interés entre el Paraguay y el Japón. En la reunión, el canciller resaltó los vínculos históricos entre ambos países, al conmemorarse este año, el 80º aniversario de la llegada de los primeros inmigrantes, a Paraguay, informó en la víspera la Cancillería nacional.
Los parlamentarios intercambiaron información sobre la situación política en el Cono Sur, y particularmente sobre el Brasil. En la ocasión, el canciller paraguayo manifestó la posición del país que es “el apego irrestricto al principio de la no intervención en los asuntos internos de los países, y el deseo de que todo sea resuelto en el marco del Estado de Derecho y la Constitución de la República”.
La declaración de Loizaga se da en medio de consultas de algunos países para una supuesta firma de documentos del Mercosur y Unasur para apoyar al gobierno de Dilma Rousseff. El país no apoyará, adelantó el vicecanciller Óscar Cabello Sarubbi. Dilma soporta una tormenta política, producto de una ola de hechos de corrupción que ponen en jaque su continuidad.
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Inmigración japonesa
Japón y Paraguay establecieron sus relaciones diplomáticas en 1919. Desde 1936, comenzaron a llegar los primeros inmigrantes japoneses al Paraguay. Actualmente, unos 7.000 inmigrantes japoneses y sus descendientes residen en el país en los departamentos de Itapúa, Alto Paraná y Amambay. La cooperación de Japón se da en diversas áreas, aunque principalmente en educación y salud. Un ejemplo es el edificio del Hospital Materno Infantil, parte del nuevo Hospital de Clínicas de la Universidad Nacional de Asunción (San Lorenzo), que se construyó con una donación total de US$ 30 millones.