El cuadro es una obra del artista Koki Ruiz, artífice del altar, y que el mismo ahora lo reprodujo en un cuadro para el Pontífice.
El Papa recibió en el palacio apostólico al presidente de Paraguay, quien estaba acompañado por una comitiva de 12 personas, entre las cuales dos hijas jóvenes, Sofía y Sol. El coloquio privado en la sala de la Biblioteca duró 23 minutos. La audiencia tuvo lugar en un clima de grande cordialidad.
El Presidente entregó al Papa también un álbum de fotografías con los momentos de la visita en su país, comentando ampliamente cada imagen: “¿Se recuerda?”. “Se recuerda aquí, cuando aterrizó y los niños se largaron a llorar?”, y así prosiguió.
El Pontífice le regaló la Medalla del Jubileo y dos libros: su exhortación Amoris Laetitia y el libro-entrevista con Andrea Tornielli “El nombre de Dios es misericordia”. Además le entregó en una carpeta su reciente mensaje para la Jornada mundial de la paz.
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Al concluir los saludos, Cartes dio otro regalo a Bergoglio: un libro fotográfico con un nuevo proyecto de saneamiento y reestructuración para la zona del Bañado Norte, área degradada en los suburbios de Asunción, que Francisco visitó el 12 de julio del 1015. El Presidente anunció que la zona tomará el nombre de San Francisco pero no en honor de San Francisco de Asís, sino del papa Francisco, que para él “ya es santo”.
Como despedida final el Papa preguntó a Cartes: “Pero usted reza siempre por mí?”. “¡Siempre!”, exclamó el Mandatario paraguayo. “Pero, ¿a favor o en contra?”, dijo Francisco sonriendo. “A favor, a favor”, fue la respuesta del Jefe del Estado.
Cartes, con esta audiencia, tuvo su cuarto encuentro con el Sumo Pontífice. El primero fue en noviembre del 2013, el segundo en abril del 2014, y el tercero en julio del 2015 durante la visita del Papa al Paraguay.