Castiglioni dijo que el presidente Mario Abdo Benítez hizo saber a todos sus colegas de la región que uno de los objetivos de su administración es “trabajar incansablemente” en la lucha contra el crimen internacional.
El ministro –que aclaró estaba firmando el primer documento internacional en representación de Paraguay– aseguró que el acuerdo de cooperación con la oficina de Asuntos de Desarme de Naciones Unidas ayudará a nuestro país a fortalecer sus capacidades para “combatir el tráfico ilícito de armas”. Señaló que es de conocimiento público que en la región lamentablemente “existe el tráfico ilegal de armas que alimenta a las mafias del crimen internacional” y que es preocupación de las autoridades paraguayas y las de los países vecinos.
El protocolo firmado con la citada oficina de Naciones Unidas es para capacitar a funcionarios públicos en la implementación en el país del Tratado de Comercio de Armas, vigente desde el 24 de diciembre de 2014, fecha en que lo firmaron 134 Estados, documento que Paraguay también ratificó.
Regina Castillo, coordinadora residente interina de Naciones Unidas, quien firmó el acuerdo de cooperación a nombre de la organización mundial, explicó que el tratado “regula el comercio internacional de armas convencionales, desde armas pequeñas hasta buques de guerra”.
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Agregó que el tratado establece normas estrictas, tanto a nivel internacional como nacional, para prevenir el trafico ilícito de armas y “sobre todo prevenir el sufrimiento humano”. Dijo que en el mismo documento se reconoce que “la gran mayoría de las personas afectadas por conflictos armados son civiles, entre ellas la mayoría niños, niñas, mujeres y adolescentes”.
La cooperación con nuestro país será no reembolsable y enfatizará en la capacitación de funcionarios del Estado que están en la prevención del tráfico de armas, según explicaron.