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El Senado prevé tratar la objeción total del presidente Horacio Cartes a la Ley 5869 “De rehabilitación financiera de los pequeños productores de la agricultura familiar campesina cuyas fincas no excedan las 30 hectáreas”. Esta legislación, que pretende pagar las deudas vencidas de los campesinos, se aprobó en el Congreso durante las movilizaciones en Asunción de más de un mes de un sector de los labriegos.
Si la Cámara Alta acepta el veto, se considera un hecho que la Cámara de Diputados haga lo mismo, con lo que quedará archivada la polémica ley.
El Gobierno, a través del ministro de Agricultura y Ganadería, Juan Carlos Baruja, pidió el viernes al Congreso que se pronuncie lo antes posible –por el rechazo o la aceptación– sobre el veto, a fin de intentar reinstalar una mesa de diálogo con los líderes campesinos.
Iglesias llaman a cumbre de poderes
El Comité de Iglesias para Ayudas de Emergencia (Cipae) invitó a una reunión cumbre –para mañana– a los titulares de los tres poderes del Estado, a fin de conversar sobre los reclamos de organizaciones campesinas. La junta directiva del organismo no gubernamental propone un diálogo sobre los reclamos que planteó la Coordinadora Nacional Intersectorial (CNI), que se mantuvo movilizada hasta el jueves último.
La convocatoria es para mañana, a las 15:00, en la sede del Cipae, en 25 de Mayo 1059, entre EE.UU. y Brasil.