El Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) no está logrando pasar el filtro del Ministerio de Hacienda para habilitar el pago a los aproximadamente 300 nuevos contratados, cuyos legajos están cajoneados desde hace más de tres meses en la citada cartera.
La situación se pone más difícil para el TSJE porque desde hace unas semanas se menciona que no se concretarán los pagos y hasta ahora la única respuesta es “que está a consideración del ministro”. Incluso los propios contratados están yendo a verificar sus legajos por su cuenta, según comentaron algunos de ellos.
Voceros de la Justicia Electoral dijeron que esperan la habilitación de pagos para este fin de mes, pero en Hacienda se mantienen en absoluto silencio, ni responden las consultas sobre el caso.
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Los nuevos contratados fueron fichados entre diciembre de 2015 y febrero de este año. El director administrativo del TSJE, Olindo López, confirmó que Hacienda no libera los pagos (ver algunos nombres en infografía). También señaló que la incorporación se realizó “a pedido de algunos directores y partidos políticos”. Sin embargo, la institución cuenta con una importante cantidad de “remanentes” que no termina de ubicar, pese a sus diversos comisionamientos (envía su personal a otros entes).
López se refirió también a una disminución de 1.407 funcionarios del TSJE desde que se desató el escándalo de planillerismo que hay en la institución. Pero, por otro lado, intentan volver a cargar 300 sueldos, con un costo mensual aproximado de G. 800 millones para el Estado.
En el TSJE habían hablado de que tienen unos 1.600 ociosos (planilleros y funcionarios sin tareas específicas). Sin embargo, pese a esa superpoblación a las autoridades del organismo no les tiembla el pulso para seguir incorporando asalariados al Estado.