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Este es el motivo por el cual el fiscal Eugenio Campos citó a declarar al excomandante de la Policía Críspulo Sotelo para que preste declaración testifical el martes a las 9:00.
El comandante deberá explicar quiénes estaban a cargo del servicio de seguridad de esa zona.
Pero por sobre todas las cosas deberá responder cuál es el motivo por el que se permitió el ingreso de vándalos a la sede del Congreso para que procedan a realizar destrozos, saqueos e inclusive incendiarlo.
El excomandante fue citado a declaración testifical, por lo que tiene la obligación de decir la verdad.
Un guardia de seguridad del Congreso declaró que el senador del Partido Democrático Progresista Arnaldo Giuzzio con las manos en alto pidió a la turba que no irrumpa en la sede del Legislativo y que como respuesta recibió un cascotazo.
El mismo guardia se encargó de suturar las heridas de Giuzzio.
El atraco se registró casi al mismo tiempo que el entonces ministro del Interior Tadeo Rojas, junto a Sotelo decían en reunión de prensa que los policías no iban a utilizar armas de fuego.
Fue luego de los primeros incidentes frente al Congreso donde el diputado liberal Édgar Acosta fue gravemente herido y hasta el momento sigue internado.
Sotelo fue destituido al día siguiente de los incidentes y en su reemplazo asumió el comisario general Luis Carlos Rojas.
Como casi nunca ocurrió en la Policía, no se realizó el acto protocolar de traspaso de mando, lo que revela la molestia del gobierno con Sotelo, así como también con Rojas porque todo se les fue de las manos.