“El desafío en todo el país es elevar el nivel de educación”

Entre los temas abordados, el profesional se refirió a la cuestión de las acreditaciones de las carreras universitarias y la diferencia existente con el concepto de habilitación de carreras. “A menudo existe confusión entre lo que es acreditación y habilitación. La acreditación y certificación es un proceso de control de calidad de la educación que se ofrece, conforme a normativas establecidas y requisitos que las instituciones educativas deben cumplir”, explicó.

Una de las condiciones para que una universidad acredite una carrera es, primero, que haya convocatoria de la Aneaes, y segundo, que esa universidad haya tenido egresados en la especialidad que está siendo sometida al proceso. Para poder iniciar el proceso de acreditación uno de los requisitos es que la carrera sea convocada.

Se suele confundir, a veces en forma deliberada, habilitación con acreditación.

La Ley 4995, de “Educación Superior”, precisamente apunta a regularizar el funcionamiento de las instituciones de educación superior.

Existen universidades muy jóvenes, como el caso de la UNAE, que ya están en proceso de acreditación de carreras, concretamente la carrera de Derecho, lo que habla del interés de la universidad por el factor de la calidad.