La doctora Lourdes González, dermatóloga, refiere que en el ser humano el pelo cumple funciones importantes como la de proteger la zona que cubre, además tiene un papel estético y, por ende, psicológico.
“Antes de hablar de caída de pelo debemos recordar que normalmente perdemos entre 80 y 100 pelos por día, que el crecimiento del mismo es mayor en verano, en mujeres entre los 15 y 30 años de edad. Sin embargo, en esta temporada se inicia el período de caída estacional del pelo, afección que preocupa a gran parte de la población, en especial a las mujeres. Aunque se trate de un proceso pasajero es un problema que puede afectar la salud, la estética o incluso ambas”, menciona.
Por su parte, la doctora Rosalba Riveros, dermatóloga, afirma que “durante días fríos es habitual padecer de caspa. Se trata de un proceso cutáneo difícil de ocultar y es un problema que afecta en líneas generales al 50% de la población adulta”.
“Es importante conocer las causas y saber que se puede controlar. Se presenta básicamente en dos formas: la forma seca o pityriasis simplex, que es la forma más frecuente y no suele asociarse a la alopecia (caída de pelo) o eritema. Las personas que padecen este tipo de caspa presentan un cuero cabelludo seco, con falta de brillo y áspero. Las escamas son finas, de tono blanco-grisáceo, más o menos adherentes, que pueden desprenderse después del peinado o de forma espontánea, y quedar entre los tallos del pelo y caer sobre la ropa”, agrega.
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Señala también que “la siguiente es la forma seborreica o dermatitis seborreica. En este tipo de caspa, además de descamación, está asociada a un aumento de la producción de grasa (hiperseborrea) y puede cursar con alopecia. El cabello presenta un aspecto aceitoso y brillante, con escamas amarillentas, más gruesas y adherentes, empapadas en una película de grasa”.
González añade que “el folículo piloso está sujeto a una renovación constante. Los ciclos del pelo (anágeno, catágeno, telógeno) están influenciados principalmente por la duración de la luz del día (fotoperiodo), además intervienen la temperatura ambiental y la nutrición”.
“La duración de la luz del día inicia la muda de pelo, en esta temporada la duración de la luz del día es menor, por lo que se cree que el fotoperiodo corto es responsable de una serie de cambios que hacen que la caída de pelo sea mayor durante esta temporada. Se considera a este fenómeno algo fisiológico”, enfatiza.
Con respecto a la presencia de caspa en el cuero cabelludo comenta Riveros que “esta aparece cuando se acorta el proceso de renovación de las células del cuero cabelludo, dando lugar a un desprendimiento rápido de los corneocitos del cuero cabelludo, que son las escamas, conocidas comúnmente como caspa”.
“Este proceso de hiperproliferación cutánea es desencadenado por un microorganismo denominado Malassezia furfur, que se sobre produce gracias a los lípidos o aceites naturales producidos por el cuero cabelludo. Este microorganismo irrita el cuero cabelludo, causando así microinflamaciones y picor en el mismo”, apunta.