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La Policía Nacional no puede realizar intervenciones, debido a la peligrosidad de los ocupantes, dicen. De acuerdo a los datos, en un área de 2.000 hectáreas ya no existen árboles en pie y la cifra se va duplicando día a día.
El área mayor deforestada se encuentra en las cercanías del improvisado asentamiento 6 de Enero, en el que viven alrededor de 350 familias. Los residentes operarían con traficantes de madera, carboneros, marihuaneros, entre otros delincuentes, según las denuncias.
Este asentamiento ya está en la jurisdicción del distrito de Yhú (departamento de Caaguazú).
El director general de Orden y Seguridad de la Policía Nacional del departamento de Canindeyú, comisario general Luis Cantero, expresó que la institución a su cargo se encuentra en condiciones para llevar a cabo cualquier tipo de procedimientos, pero dijo que la fiscalía y otras instituciones competentes deben también hacer su trabajo.
En ese sentido, mencionó al Instituto Forestal Nacional (Infona), Ministerio Público y la Secretaría del Ambiente (Seam) como las encargadas de acompañar las tareas policiales. Añadió que la erradicación de este delito depende del trabajo conjunto porque la intervención de la Policía Nacional no alcanza.