Canchas inclusivas: las diferencias no duelen

Un equipo de básquet infantojuvenil practica regularmente en la Secretaría de Deportes. En sus integrantes, hay un detalle que no se ignora, pero se toma con naturalidad: Sus participantes son chicos con y sin discapacidad, que comparten sin distinciones.

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Si bien hay quienes desde pequeños fueron duchos en la práctica de los deportes, también estamos los otros, esos que, de seguro, tenemos más de una anécdota vergonzosa en la que fuimos protagonistas de burlas por parte de los compañeros, que nos sacaban de la cancha por nuestras escasas condiciones deportivas.

Talentosos hay muchos. Y a los que van a ser buenos, se les nota desde chicos, en las prácticas de deportes desde los primeros grados de la escuela.

En las Escuelas Deportivas de la Secretaría Nacional de Deportes, desde hace un tiempo se viene notando a un grupo de chicos muy hábiles que desarrollan sus habilidades en deportes como el básquetbol, el bádminton, el taekwondo y el atletismo.

Entre los niños que integran el equipo, hay un detalle, que si bien no se ignora, se toma con la mayor naturalidad del mundo: El plantel de jugadores está integrado por niños tanto con discapacidad como sin ella.

Todos siguen las reglas del juego sin distinción, porque justamente en eso consiste la idea de las Escuelas Deportivas inclusivas de la Secretaría Nacional de Deportes (SND), un emprendimiento que empezó hace apenas pocas semanas, y que en ese breve tiempo, ha demostrado que, cuando hay una buena enseñanza y mucha paciencia de profesores capacitados, las diferencias no tienen por qué doler.

Desde la SND comentan que desde hace un tiempo han venido planteándose la inclusión de las personas con discapacidad como un desafío permanente que buscan superar.

Es por este motivo que se da la promoción de espacios de práctica deportiva que reciban a niños con y sin discapacidad, que compartan juntos sin distinción.

Los primeros frutos de este trabajo fueron revelados por la profesora Leticia Báez, entrenadora de básquetbol, que tiene a su cargo a unos 16 niños con y sin discapacidad, que entrenan este deporte los días martes y miércoles en el local de la SND (Eusebio Ayala casi RI 6 Boquerón).

El resultado de este trabajo se va tornando cada vez más palpable, sobre todo en la paciencia y el compañerismo que van adquiriendo los niños para con sus compañeros que, por diferente razones, requieren de mayor tiempo al momento de manejar las reglas del juego.

Poco a poco, en las canchas inclusivas de la Secretaría Nacional de Deportes, se va instalando la filosofía de que la palabra “normal”, no define absolutamente nada y que la condición de ser personas, va mucho más allá de las limitaciones que cada ser humano pueda tener.

La iniciativa de la SND es un trabajo conjunto entre la Fundación Saraki -que trabaja fuertemente por la inclusión- y la organización Olimpiadas Especiales. Juntas, impulsan el proyecto de las escuelas deportivas inclusivas, donde los chicos de 6 años en adelante, practican deportes como el básquetbol, el bádminton, el taekwondo y atletismo.

En lo que se refiere específicamente al básquetbol, disciplina que ocupa a nuestra entrevistada, la profesora Leticia Báez, las clases son los días martes de 08:00 a 09:00, (para niños de 6 a 10) y los miércoles de 17:00 a 18:00 (para niños de 10 en adelante).

En estos días, la cancha de básquetbol se vuelve un ambiente lleno de diversión, donde los pequeños deportistas liberan energías y felicidad, bajo la atenta mirada de entrenadores, especialmente dotados de paciencia y amor para hacerse cargo de estos grupos.

Existen dos tipos de grupos: los niños que practican regularmente en las Escuelas Deportivas, y los que solo están asistiendo temporalmente a la Colonia de Vacaciones Inclusiva, un emprendimiento paralelo aunque muy similar, que incluye a los chicos que solo pueden acudir durante el verano.

Los niños que quieran asistir a las clases, deben contactar primero a Olimpiadas Especiales, y a través de esa organización les realizarán enlace con la Secretaría Nacional de Deportes, para que los chicos puedan asistir a los juegos. La dirección de Olimpiadas Especiales es Chile 868 entre Humaitá y Piribebuy, y el teléfono es el (021) 440-845. También tienen un celular al que podés contactar, y es el (0981) 407 602.

Amor por el deporte, respeto y compañerismo, son los valores que aprenden estos pequeños gigantes del deporte nacional, que con su nobleza y ternura dan ejemplo incluso a muchos adultos, que necesitan aprender mucho más sobre la no discriminación.

Todas las prácticas deportivas son supervisadas bajo la atenta mirada de los profesionales deportivos Alcides Fernández y Leticia Báez.

En las primeras clases desarrolladas, los profesionales van educando a los pequeños deportistas en reglamento de juego, bote de balón y lanzamientos. Así, los alumnos y alumnas van aprendiendo sobre desplazamiento en cancha y otros detalles que hacen a la disciplina deportiva del baloncesto.

En estos puntos es donde comienzan las estrategias de enseñanza que implementan los docentes. Según nos explicó la entrenadora Leticia Báez, la clave está percatarse del ritmo de aprendizaje de cada chico, y de que algunos tendrán la necesidad de observar más repeticiones antes de poder aplicar las reglas de juego por ellos mismos.

Desde el 2013 la Secretaría Nacional de Deportes -a través de un convenio de cooperación- viene realizando entrenamientos de básquetbol en tres diferentes escuelas de Asunción. Pero recién en el 2016 y 2017 se trabajó con el Proyecto Maximus (apoyo de la SND Y OEP) y las clases se daban en los Sábados Deportivos con Olimpiadas Especiales Paraguay.

Este año, la SND comenzó un proyecto en conjunto Fundación Saraki en conjunto con Olimpiadas Especiales con las Escuelas deportivas.

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