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La Organización Mundial de la salud (OMS) estima que actualmente hay unos 415 millones de personas con diabetes en el mundo. El organismo advierte que si no se toman medidas de prevención para esta condición, para el año 2040 esta cifra global ascendería a 642 millones.
La diabetes es una enfermedad crónica, que no tiene cura, aunque puede ser prevenida y controlada.
Estos datos nos llevan a concluir que si bien la diabetes puede ser un tema del que se ha hablado mucho, esto no mengua la necesidad de seguir insistiendo en la prevención de una enfermedad que es una emergencia en salud pública. El peor error que se puede cometer es subestimarla.
El 14 de noviembre, el mundo conmemora el día mundial de la diabetes, una fecha escogida para recordar a la población la importancia de adquirir hábitos preventivos para evitar una enfermedad que no tiene cura, aunque sí muchas opciones de tratamiento que garantizan una óptima calidad de vida siempre y cuando el paciente cumpla con las recomendaciones médicas.
Una de las principales complicaciones que se derivan de la diabetes es la retinopatía diabética, una complicación en los ojos que es generada por el deterioro de los vasos sanguíneos que irrigan la retina. Esta falta de funcionamiento puede tener como consecuencia que los ojos sufran una fuga de sangre u otros fluidos propios del órgano ocular. Esta es una de las complicaciones más paralizantes de la diabetes, pues puede llevar incluso a la ceguera del paciente.
Es por eso que este año, el Programa Nacional de Control de la Diabetes, del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, decidió concentrarse en esta manifestación de la enfermedad. Bajo el lema “ojo con la diabetes”, se llevarán a cabo numerosas actividades como servicios médicos, exámentes gratuitos, correcaminatas y otras propuestas recreativas. Todo con el objetivo de transmitir el mensaje acerca de la importancia de la detección temprana de la enfermedad de manera a tratarla a tiempo y evitar las complicaciones propias de la etapa crónica.
La doctora Gilda Benítez, directora del Programa Nacional de control de la Diabetes, sostiene que la población no debe alarmarse al escuchar hablar sobre la diabetes y su condición de incurable.
Si bien es una enfermedad que tiene complicaciones muy graves, y la falta de atención puede derivar en la muerte, la profesional asegura que con un buen tratamiento se puede vivir décadas sin necesitar siquiera de una internación.
Existen dos tipos de diabetes: el tipo 1 es autoinmune. La persona nace con la predisposición genética a padecer la diabetes, y la adquiere al momento en que aparece un factor desencadenante de la enfermedad.
El tipo 1 se manifiesta más rápidamente. Según la doctora, en un mes la persona ya puede percatarse de que algo anda mal con su organismo y, tras unos estudios, ser diagnosticado con diabetes.
El tipo 2: no es autoinmune, y se da por una mala función de la hormona insulina en el cuerpo. La gran diferencia con el tipo 1 es que esta diabetes sí se puede prevenir. Este tipo de diabetes sí se puede prevenir con buenos hábitos alimenticios y evitando la vida sedentaria.
Otra de las grandes diferencias es que el paciente que padece el tipo 2, puede demorar incluso años en percatarse que tiene la enfermedad. “El gran problema es que la persona no siente nada, no da ninguna molestia, aunque la persona ya está desarrollando una intolerancia a la glucosa”, menciona la profesional.
En ambos tipos de diabetes la detección de la condición puede resultar un poco engañosa, pues no se detecta con un simple estudio de rutina, sino únicamente con un examen específico de diabetes, denominado glucosa plasmática en ayunas.
“Muchas veces las personas se hacen un estudio convencional de sangre y el doctor se percata de que el nivel de azúcar en sangre está un poco más alto de lo normal. Es en ese momento cuando, por sospecha, el médico debe ordenar que el paciente se realice el estudio específico para descartar diabetes”, explica la directora del Programa Nacional de Diabetes.
Si usted siente que repentinamente la boca se le comienza a secar y siente mucha sed, o ha notado una pérdida llamativa de peso aún cuando sigue comiendo normalmente, y orina más de lo habitual, no deje pasar estos síntomas.
Podrían ser los indicadores que lo ayuden a detectar en forma temprana el cuadro. Recuerde que cuando más pronto inicie el tratamiento, se garantiza una vida normal, manteniendo a raya los niveles de azúcar.
Quizá alguna vez se haya preguntado qué es lo peor que le puede pasar a una persona que sufre diabetes e ignora la enfermedad, cometiendo “transgresiones alimentarias graves”, ingiriendo azúcar pese a su condición.
La doctora Gilda Benítez comenta que la suba descontrolada de azúcar puede general una descompensación aguda e incluso derivar en la muerte.
No obstante, como profesional afirma que es importante no generar un pánico innecesario en la población. “Por el contrario, es necesario transmitir el mensaje positivo de que si hay un tratamiento, uno puede vivir toda una vida sin pasar nunca por una internación”, menciona la directora del Programa de Diabetes.
Al consultarle cuál es la mejor manera que tienen las personas con diabetes para mantenerse en buenas condiciones de salud, la doctora no duda en afirmar que la clave de todo está en la alimentación.
“La persona con diabetes en realidad puede comer todos los alimentos que se consumen en el hogar, y que abarquen una alimentación saludable. La dieta debe incluir carne vacuna, hidratos de carbono, muchas verduras y una cantidad controlada de panificados. Lo cierto es que todas las personas deberían alimentarse así normalmente”, explica la doctora.
La diabetes es producto de hábitos poco saludables que además de la alimentación incluyen el sedentarismo, el sobrepeso, la obesidad y el tabaquismo. Dejar a un lado estos hábitos no solo repercutirá en una mejor calidad de vida para usted, sino que mantendrá los niveles de azúcar tan regulados que incluso podría no necesitar de medicamentos.
Por fortuna, en la actualidad existen innumerables tratamientos para esta enfermedad.
Además de la medicación con insulina, también es posible utilizar, dependiendo del estado del paciente, pastillas estimulantes de la secreción de insulina o insulinosensibilizadores.
A partir de este martes 8 de noviembre, el Programa de Diabetes del Ministerio de Salud arranca una intensiva campaña que tendrá como objetivo que la ciudadanía aprenda mucho más sobre la enfermedad y cómo mantenerse a salvo.
La detección será uno de los ejes fuertes de este año, según explicó la profesional entrevistada.
El miércoles 9 de noviembre, se realizará una jornada de control de fondo de ojo, para detectar retinopatía, la enfermedad de la que ya hablamos más arriba. Para los pacientes que sean diagnosticados, se realizarán charlas educativas. La actividad se realizará de 07:30 a 11.00.
La campaña continúa el jueves 10 de noviembre en el parque Carlos Antonio López, con una jornada detección, en la que todos los que tengan alguna duda podrán someterse al estudio de la diabetes en forma gratuita, y así descartar sospechas. Además, estarán disponibles médicos que realizarán chequeos, orientaciones en materia de nutrición y, para los que quieran divertirse desarrollando actividad física, una clase de zumba. La serie de dinámicas será entre las 07:30 y las 11:00 de la mañana.
Si le apasionan los deportes, el domingo 13, de 08:00 a 11:00, tendrá la posibilidad de participar de una correcaminata, con el fin de crear con ciencia sobre la importancia de impulsar la actividad física como una forma de proteger la salud. No se preocupe, no necesita tener habilidades atléticas para participar, el evento es apto justamente para personas que se encuentran en estado sedentario y necesitan iniciar actividad física.
Finalmente, el lunes 14 de noviembre, Día Mundial de la Diabetes, la campaña se cierra con un acto oficial en la sede del Ministerio de Salud (Pettirossi esquina Brasil), a las 07:00.