Henry Ford, el fundador de la compañía Ford Motor Company, dijo “un negocio que no hace otra cosa más que dinero es un negocio pobre”.
Seguir este pensamiento y ayudar a sus compatriotas residentes en Argentina, fueron las motivaciones que llevaron a Derlis Villalba a fundar del Instituto de Capacitación América, un lugar donde jóvenes y adultos pueden acceder a una formación en un oficio con rápida salida laboral.
Villalba (38) fue a vivir a la capital porteña hace 14 años, en busca de nuevas oportunidades. Conoció a miembros de la comunidad de paraguayos residentes allí, un grupo de personas unidas, sencillas y sobre todo, esforzadas, quienes también fueron a tratar de abrirse camino y mejorar su calidad de vida.
Durante los primeros años de su residencia en Buenos Aires notó algo llamativo. La mayoría de los paraguayos que conoció eran jóvenes, muy trabajadores que anhelaban la posibilidad de capacitarse. Pero al tener que trabajar todo el día, no les quedaba tiempo para tomar cursos o asistir a clases.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Fue entonces que empezó a soñar con un centro de capacitación en oficios, accesible a la comunidad paraguaya, donde se sintieran a gusto, sin vergüenza o acomplejados.
“Hay un propósito que todos tenemos en común: ser felices. Y el trabajo forma una gran parte de nuestra vida, así que debemos encontrar un oficio que nos haga sentirnos bien con nosotros mismos”, comentó.
Este sueño se fue materializando cuando conoció a Emiliano Zahorecz, un argentino especialista en refrigeración, quien tenía proyectos, no solo de abrir su propio negocio, sino de realizar una actividad que deje una huella y ayude a mejorar la vida de las personas de su entorno.
Aunando esfuerzos, Derlis y Emiliano consiguieron abrir en mayo del año pasado el Instituto de Capacitación América, un academia donde se brindan cursos de oficios y capacitación profesional, dirigidos a los paraguayos, de los que participan numerosos argentinos.
“Derlis me había contactado para dar clases de refrigeración en la Mutual Buenos Aires, un lugar bastante conocido por la comunidad (…) nos hicimos amigos y con el pasar del tiempo tuvimos ideas y vimos que este lugar carecía de un instituto así, donde el alumno recibe la experiencia práctica de cuando está estudiando”, señaló Emiliano.
Ubicado en la calle O'brien 1245 de Constitución, en Buenos Aires, el instituto cuenta con más de 250 alumnos, quienes reciben instrucción en diferentes rubros como refrigeración, electricidad, peluquería, masajes terapéuticos, secretariado, locución y otros.
Los cursos se imparten todos los días en diferentes horarios. Dan clases sábados y domingos considerando que muchos de los alumnos trabajan durante la semana y solo en estos días tienen tiempo para asistir a clases.
“Somos emprendedores los dos y siempre apostamos por diferenciarnos (…) es algo que queremos transmitirlo de la mejor forma posible. Queremos que cada persona que vaya al instituto reciba una formación correcta y digna de lo que vino a buscar”, comentó Emiliano.
Las clases son impartidas por docentes que en su mayoría son connacionales y muchos de los cursos se dan en guaraní. Gran parte de las personas que acuden al instituto no recibieron formación previa o básica, por lo que los talleres los hacen en forma práctica y los exámenes con presentación de trabajos.
El instituto está encaminado a conseguir la certificación del Ministerio de Educación argentino. Cuando la obtengan adaptarán la modalidad de los cursos, que ahora tienen costos, para que sean accesibles a todos los interesados.
"Nosotros buscamos la salida laboral rápida de nuestros alumnos, es más, algunos ya tomaron trabajos y con eso fueron pagando sus cursos", expresó Derlis.
Pese a ser un emprendimiento de índole privada, de igual manera tienen programas de becas con las que benefician y buscan mantener en el sistema de formación a la mayor cantidad posible de estudiantes.
"Buscamos también que en el centro los alumnos tengan un sentimiento de pertenencia, debido a que sus profesores y compañeros viven su misma realidad, conocen sus necesidades y la situación en la los paraguayos residen en Buenos Aires", subrayó Derlis.