El miedo a la anestesia

La tranquilidad y no sentir dolor durante una cirugía son los grandes beneficios de la anestesia. Sin embargo, existe mucho miedo y tabúes en las personas antes de ingresar al quirófano. La consulta preanestesia es importante para evacuar todas las dudas.

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El médico Gustavo Riego, presidente de la Sociedad Paraguaya de Anestesiología (SPA), manifestó que la consulta preanestesia ayuda a los pacientes a evacuar todos sus miedos. Dijo que la utilización de la anestesia facilita muchos procedimientos, estudios y complicadas intervenciones. Agregó que la tecnología y la capacitación avanzaron en la especialidad y ello hace que la aplicación sea más segura.

Sin embargo, aclaró que muchos pacientes siguen con innumerables dudas antes de ingresar al quirófano. Lo principal es disminuir la ansiedad y brindar tranquilidad de quien está por enfrentarse a una intervención quirúrgica, dijo.

Otra pregunta que generalmente realizan los pacientes es si deben estar en ayunas antes de someterse a un proceso anestésico. La respuesta es sí. Cualquier técnica anestésica puede inducir el vómito y la regurgitación del contenido gástrico y posterior aspiración pulmonar ha sido una de las causas más frecuente de accidentes fatales directamente atribuidos a la anestesia.

En cuanto a las reacciones alérgicas provocadas por los anestésicos, son poco frecuentes. Sin embargo, siempre es necesario corroborar a qué componente es o puede ser alérgico el paciente. En el caso que esto ocurra, existen alternativas para todos los componentes.

Por su parte, la doctora Yolanda González, jefa de Cirugía del Hospital Nacional de Itauguá, manifestó que toda cirugía supone 0,1% de riesgo y es allí donde entra el miedo de los pacientes antes de practicarse una intervención quirúrgica. 

Recordó que cuando comenzó a trabajar, hace 30 años, tuvo que operar con la asistencia de técnicos en anestesia y que si algo salía mal en la cirugía toda la responsabilidad recaía sabre el médico. Sin embargo, ahora no se ingresa al quirófano con un técnico, sino con un médico anestesiólogo, y eso hace que la responsabilidad sea compartida y, sobre todo, más segura.

Agregó que ahora también se apuesta más a la formación de estos especialistas, pero aún faltan muchos para poder cubrir la demanda que se tiene en el sector.

"La cantidad de anestesiólogos es muy poca, se necesita más. Solo se concentran en Central, Encarnación y Ciudad del Este. Necesitamos que los hospitales de las cabeceras departamentales funcionen integralmente y de esa manera no se deriven pacientes hasta Central", dijo la doctora Yolanda González.

Por su parte, el doctor Bruno Balmelli, médico cirujano y director del Centro Nacional del Quemado, manifestó que la población en general sabe poco y siempre está confundida con respecto a la anestesia, principalmente, porque se malinforma. “En cada operación en que se va a necesitar anestesia, el miedo y las dudas son los mismos. Es por eso que debemos estar informando bien a los pacientes”, dijo el galeno.

A su vez, la anestesióloga Mirian Aguilar recalcó que la preconsulta es primordial. Manifestó que en esta se realiza una evaluación detallada del paciente, se verifica el historial médico, se ve si son necesarios estudios complementarios, se explica qué técnica se utilizará, se informa al paciente sobre posibles riesgos o complicaciones y se aclaran dudas o temores.

Los riesgos durante la anestesia general van desde leves, como la pérdida o daño de un diente, dolor de espalda, alteraciones asociadas con la posición quirúrgica, dificultad transitoria para orinar, molestias oculares y de garganta, heridas en boca y tos, hasta las más severas como aspiración del contenido gástrico, shock anafiláctico, reacciones a los medicamentos y problemas cardíacos que pueden ocasionar alteraciones de mayor importancia.

Por otra parte, la anestesia local es bastante segura gracias al desarrollo de agujas de mejor calidad y diseño, así como de nuevas técnicas anestésicas y una preparación más especializada del anestesiólogo. De manera muy poco frecuente se presentan situaciones como dolor de cabeza o de espalda; más raros aún son los problemas cardíacos, lesiones nerviosas o de médula espinal.

El titular de la Sociedad Paraguaya de Anestesiologia, Gustavo Riego, manifestó que se cuenta con 195 socios y que 45 especialistas no están asociados. Agregó que la cantidad es sumamente escasa para la necesidades que se tiene en el Paraguay. 

Según los datos, en el país hay unos 240 anestesiólogos titulados y unos 400 técnicos, pero la función de estos últimos es solo asistir a los anestesiólogos titulados. Solo en el caso de que un médico no esté y en caso de necesidad extrema puede un técnico aplicar la anestesia.

Para ser un especialista anestesiólogo se debe cursar la carrera y luego realizar la residencia, como mínimo unos diez años de formación. En nuestro país se capacita en el  Hospital de Clínicas, Hospital Nacional de Itauguá, en el Instituto de Previsión Social, en el Hospital Militar, en el hospital de Ciudad del Este y en el de Encarnación.

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